Hoy se reabren las audiencias del juicio por la desaparición de 22 personas en el centro clandestino de detención que funcionaba en la ex Jefatura de Policías durante el último proceso militar. Está previsto que declaren nueve testigos, entre ellos Juan Fote, hermano de Leandro, dirigente gremial de Fotia en los 70.
También se escuchará el testimonio del militar Augusto Neme.
Se trata de la jornada número siete, donde está previsto que declaren nueve testigos. El primero en hacerlo será Carlos Soldatti quien estuvo secuestrado en la ex Jefatura de Policías.
“El 28 de septiembre de 1976 me secuestraron policías a las 2 de la mañana de mi casa. Me subieron a un furgón donde también estaba Pedro Pablo Rodríguez. De ahí me llevaron a Famaillá”, comentó Soldati con tono pausado el jueves pasado.
Cuando detallaba que sufrió torturas y precisó que luego lo trasladaron a la Jefatura, el tribunal interrumpió la declaración y le pidió a un médico del Siprosa que explique que le pasaba a Bussi que aludió dolor en el pecho. El médico recomendó internación, pero el represor, 20 minutos después fue trasladado al country donde cumple prisión domiciliaria.
De esta manera ayer, un perito de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, junto a médicos del Siprosa y de la querella, revisaron a Bussi. Hasta el cierre de esta edición no había novedades de su verdadero estado de salud, que según estiman los organismos de derechos humanos es apto para afrontar un juicio y que el genocida utiliza su salud para dilatar el juicio
Séptimo día de un juicio histórico
En lo que va del juicio declararon más de quince testigos que en su mayoría fueron detenidos de manera ilegal en diversos centros clandestinos. Todos, sin excepción, aseguran que en la Jefatura se realizaban torturas, fusilamiento y desaparición de cuerpos.
En el último día, el jueves pasado, el testigo Juan Martín Martín, uno de los más importantes, relató que Bussi solo se acercaba a los detenidos para torturarlos y dio detalles de varios centros de detención, entre ellos La Jefatura. Además precisó que el “tuerto” Albornoz y su subordinado, Luis De Cándido eran torturadores. Este último participó, según Martín, de varios secuestros.
En este sentido para hoy se estima que continúe la ronda de testigos. Uno de los testimonios más interesantes de la jornada será el de Juan Antonio Fote, hermano de Leandro, uno de los dirigentes gremiales de FOTIA más resonante de la época. Está desaparecido. También el militar Augusto Neme.
Además declararán Mena, Carlos María, Ortíz, Luis Salvador; Lapegue, Roberto Orlando; Del Valle, Jorge Alfredo; Caballero, Pedro Osvaldo; Fernández, Rodolfo Peregrino.
Se juzgan por crímenes de lesa humanidad a los militares Menéndez, Bussi, Zimmerman (jefe de policía en el 76) y Cattaneo (segundo de Bussi en el 76). También están acusados los policías el “tuerto” Albornoz (jefe de inteligencia en el Proceso) y los hermanos De Cándido.
Sebastián Ganzburg
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