07/10/2007 - Nacional B

El partido que yo vi, por Daniel A. Villalba

San Martín lo ganó desde el arranque. Actitud, ganas, solidaridad, concentración. Merecido triunfo conseguido con madurez.Independiente Rivadavia de Mendoza, no fue un rival peligroso.

Los santos volvieron a jugar como lo hacían en el Argentino A. Apoyado por un público que sólo quiere ganar, sin importar como juegue, San Martín hizo un buen partido, sin realizar un fútbol vistoso, fue práctico y consiguió los tres puntos necesarios para seguir prendido en la cima.

Una cosa es jugar bien y otro jugar lindo. San Martín jugó bien y se quedó con el triunfo. Ayer el rival vino dispuesto a mantener el empate. No hizo nada, sólo esperar que pasen los minutos. Roldán, puso a Oviedo por izquierda y este respondió con eficiencia. Ibáñez sin ser aquel del ascenso, consiguió redondear el mejor partido desde que volvió a La Ciudadela. La defensa mostró solidez y jugó sin distracciones. Los del medio supieron crear los espacios, cuidando bien la pelota, y  claros en los pases. Adelante la ansiedad hace que se desperdicien situaciones de convertir, con más tranquilidad San Martín puede hacer más goles. En los últimos partidos creó varias, y eso en este torneo es muy difícil.

Los santos se ubicaron en la zona de privilegio, con esfuerzo, voluntad, concentración y con el apoyo incondicional de sus simpatizantes que en cada encuentro, de local, hacen sentir la presión a los rivales.

Roldán estuvo cuestionado, y fue insultado. Pero con responsabilidad, trabajo, y persuasión supo recuperar y acrecentar su liderazgo para revertir la situación. Claro está que algunos jugadores supieron escuchar y poco a poco comenzaron  demostrar porque fueron contratados.

San Martín tampoco es el Real Madrid, puede perder varios partidos, pero la actitud solidaria y la concentración de equipo está volviendo. Con esto será difícil ganarle, por lo menos de local.

Daniel A. Villalba