Con la lectura de un poema de Eduardo Ramos, el querellante Bernardo Lobo Bougeau finalizó con los alegatos de las querellas. Pidió reclusión perpetua para Menéndez y Albornoz. Prisión perpetua para Luis De Cándido, para el hermano de este, cuatro años. Demismo modo lo hicieron los querellantes Vitar y Guagnini quienes fueron ovacionados por el público. En todos los casos cumplimiento en cárcel común.
La querella, integrada por Emilio Guagnini y Julia Vitar solicitó ayer que el represor Luciano Benjamín Menéndez, Roberto Albornoz y Luis De Cándido sean condenados a prisión perpetua en una cárcel común por haber cometido violaciones a los derechos humanos. Por su parte el querellante por la Secretaría de Derechos Humanos y por el caso Ramos, Bernardo Lobo Bugeau, pidió reclusión perpetua, también en cárcel común y prisión para De Cándido. Mientras que para el hermano de Luis, Carlos, solicitaron cuatro años de prisión.
"Durante estos cinco meses de producción de prueba (ver Cronología del Caso Jefatura: primera parte y Cronología del Caso Jefatura: segunda y última parte), la conclusión ha sido contundente para la sociedad tucumana en el sentido de que hubo un plan sistemático de represión y exterminio", aseguró el abogado Emilio Guagnini en el momento de efectuar los alegatos.
El letrado, quien representa, junto con Julia Vitar a los familiares de Rolando y Marta Coronel, víctimas de la dictadura militar, insistió en el mismo concepto: "la gravedad y la naturaleza de los crímenes que han cometido (lesa humanidad) amerita que cumplan condena en una cárcel común y que no se les otorgue el beneficio de que, por razones de edad, puedan gozar de la detención domiciliaria".
Guagnini también destacó que, en el caso de los Coronel, ha quedado demostrado que "los represores también se quedaban con las propiedades de las víctimas, como sus viviendas, que eran usurpadas por aquellos que los secuestraban".
Como consecuencia, el abogado requirió al Tribunal Oral en lo Criminal Federal que imponga la pena de prisión perpetua (en una cárcel común) a Menéndez, así como a los ex policías Roberto "El tuerto" Albornoz y a Luis "El Cordobés" De Cándido, mientras que pidió cuatro años para Carlos De Cándido.
Antes, Vitar, contextualizó los delitos en el marco de genocidio lo cual está documentado en los papeles presentados por Clemente. Expresó que la práctica de apropiación de niños es “un acto solo cometido en Argentina, con lo cual se pone en evidencia los efectos intergeneracionales que tuvo el Proceso”.
Finalmente Guagnini destacó el comportamiento de los familiares de las víctimas del Terrorismo de Estado que “jamás apelaron a la justicia por mano propia”. Al finalizar el alegato, entre el público, que copó la sala, estaba la gente de Hijos que mediante carteles gritaron: NI OLVIDO NI PERDÓN.
Reclusión perpetua en cárcel común para Menéndez y Albornoz
A diferencia de los otros querellantes, Bernardo Lobo Bugeau, quien representa a la Secretaria de Derechos Humanos de la Nación y se encarga del caso Ramos, solicitó al Tribunal, reclusión perpetua en lugar de prisión perpetua para Menéndez y Albornoz. Una exposición muy trabajada que no pasó por alto ningún detalle técnico. Opinó que la desaparición de Ramos “es un crimen político”, para esto trajo a colación el testimonio de Marta Rondoletto y Cristina Barrionuevo, ambas compañeras del periodista desaparecido. También aseguró que “Menéndez y Albornoz son traidores a la patria porque se apropiaron del Estado de Derecho. Por lo tanto los subversivos son Menéndez y Albornoz”.
Respecto al porqué de la reclusión en lugar de la prisión comentó a TucumánHoy que “la ley vigente en esa época establecía una diferencia entre la reclusión y la prisión. La reclusión era mucho más rígida. Había otras cosas absurdas como que la privación ilegítima de la libertad merecía pena de muerte, pero no pedimos porque no estamos a favor de ese sistema”.
Cuando terminó su alegato, dijo al Tribunal: “en todos los casos las penas deben cumplirse en cárcel común. El pedido expreso es innecesario porque no existe otro lugar en nuestro país que las penitenciarias para cumplimientos de las penas”.
Para Luis Armando De Cándido solicitó prisión perpetua por ser el asesino de Rolando Coronel cuando lo trasladaban a Jefatura de Policía y por los tormentos con tortura seguida de muerta contra la hija de Rolando, Marta.
Sobre la situación de Carlos De Cándido mencionó que “será una condena inédita en estos tipos de juicios. Los querellantes pidieron cuatro años de prisión por usurpación y encubrimiento. Esperamos que la situación de este imputado sea evaluada por el Tribunal”. En este sentido explicó la figura de encubrimiento al momento de los hechos era más grave que la usurpación”.
Cerró su exposición con un poema escrito por Eduardo Ramos a modo de homenaje. Horas antes alegó Mendivil, también pidió perpetua en cárcel común.
Hoy, a las 9.30, el fiscal Terraf realizará su alegato por las 22 víctimas que pasaron por el centro Clandestino Jefatura de Policía. Los alegatos se sucederán hasta el 7 de julio, para que el día siguiente, el Tribunal, integrado Carlos Jiménez Montilla (presidente), Gabriel Casas y Josefina Curi, se limitará a dar a conocer la parte resolutiva del pronunciamiento, mientras que los fundamentos serán leídos durante el mes de agosto, durante una fecha que aún no fue.
La sentencia determinará la eventual responsabilidad de Menéndez (ex titular del III Cuerpo de Ejército, del que dependía la V Brigada de Infantería, con sede en Tucumán); de Albornoz, ex jefe del Servicio Confidencial de Inteligencia (Sic), así como de los ex policías Luis y Carlos De Cándido.
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