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AMPLIARActo en la ex escuela de policía donde funcionaba un centro

Una multitud marchó por la memoria en Tucumán

La jornada comenzó por la mañana cuando cientos de fotografías de desaparecidos de Tucumán inundaron Plaza Independencia. Luego se realizó un homenaje en Junín y Sarmiento donde funcionaba La Jefatura, un centro clandestino de detención. Una cuadra entera marchó hasta Plaza Independencia donde se leyó un documento único “queremos que todos los genocidas vayan a cárcel común”, dijeron.

"33 años de vida, venciendo a la muerte", se leía en algunos de los carteles colgados en la Plaza.

En Tucumán la jornada de ayer, recordando los 33 años del golpe de Estado que trajo aparejado siete años de terror, fue intensa. Comenzó a la mañana cuando la gente de FADETUC, Madres de Plaza de Mayo filial Tucumán e HIJOS colgaron, en Plaza Independencia, fotografías con los rostros de cientos de desaparecidos en Tucumán. Además habían carteles que decían "No hay olvido ni perdón" y "33 años de vida, venciendo a la muerte".

Varias horas después, a las 18, organismos de Derechos Humanos como FADETUC, Madres de Plaza de mayo filial Tucumán, HIJOS, junto a facciones políticas que portaban banderas de Montoneros, PC, banderas cubanas y venezolanas, sin faltar la pancarta de ANDHES se concentraron en muñecas y sarmiento.

Así numerosos viejos militantes y luchadores por los Derechos Humanos se encontraron, abrazo de por medio y se dirigieron a la ex escuela de policía ubicada precisamente en esa esquina donde funcionaba un centro clandestino de detención. Los bombos y redoblantes sonaban junto a las voces que gritaban “cárcel, común perpetua y efectiva, ningún genocida por las calles de Argentina” para continuar con “olé olé, olé olá, como a los nazis les va ha pasar, a donde vayan los iremos a buscar”, finalizando con “Bussi asesino, la cárcel tu destino”.

Estudiantes secundarios, gente común y las organizaciones antes mencionadas continuaron marchando por Sarmiento, tomaron Junín hasta llegar a Santa Fe. Como lo vienen haciendo desde hace tres años consecutivos hicieron un pequeño acto homenaje. Depositaron una enorme piedra y plantaron un lapacho amarillo “en homenaje a los compañeros desaparecidos”, dijeron desde FADETUC. Misteriosamente las piedras que años anteriores allí dejaron, no tan grandes como ésta de más de 300 kg, pero tampoco pequeñas, “desaparecieron”.

En esta enorme piedra se lee: “Aquí funcionó el centro clandestino de detención y torturas 'La Jefatura'. 1975-1983. Ni olvido ni perdón. Justicia”. “Para señalizar este lugar hicimos notas, pero nos dijeron que hay que hacer expedientes, todo se pierde en los pasillos de la burocracia”, enfatizaron desde FADETC.

La multitud que ocupaba una cuadra entera siguió por Santa Fe hasta 25 de mayo. Cada vez eran más. Niños, grandes, abuelos, bebés, todos haciendo memoria. No faltaron las pintadas en algunas paredes del centro capitalino. De esta manera llegaron a Plaza Independencia donde algunos partidos de izquierda habían llegado antes pues no apoyaron a los organismos de Derechos Humanos.

Sin embargo todos juntos dieron una vuelta por la Plaza. Sobre la calle y frente a Casa de Gobierno desde HIJOS Julia Vitar leyó el documento único. “Queremos que todos los genocidas vayan a cárcel común, perpetua y efectiva”. Además destacaron la importancia de que se elevó la causa de la ex Jefatura de policía a juicio oral y público. “Por primera vez se juzgará con el criterio de centro de víctimas de detención que es lo que venimos pidiendo desde que las causas fueron abiertas”, se leyó.

En este sentido afirmaron que en esta causa “no solo estará Bussi y Menéndez, sino también Albornoz y Zimermman y los policías que los acompañaron”. Al instante comenzaron los gritos de “¡asesinos, asesinos!”

“Exigimos: juicio y castigo a todos los genocidas y cómplices ya, esclarecimiento de Jorge López, que Bussi cumpla su condena en cárcel común y elevación a juicio oral ya, de la causa Azcuénaga”, dijeron y agregaron: “inmediata destitución de jueces, funcionarios y policías que participaron de la dictadura”.

Finalmente el conocido grito de clamor inundó Tucumán “¡30 mil compañeros desaparecidos presente, ahora y siempre!”.

Sebastián Ganzburg
sebaganzburg@gmail.com