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AMPLIARMary Ahumada se propone seguir luchando por el esclarecimiento del caso

"Seguiré luchando, pero ya nada me reconforta", dijo Mary Ahumada

La madre de María Fernanda Chaila, la joven de cuyo asesinato se cumplió ayer un año, definió de esa manera su estado de ánimo. Se siente responsable de no haber parado a tiempo la relación de su hija con Lucas González. Si bien, trabajará para crear una fundación que atienda a jóvenes maltratadas, la madre de la víctima asegura que "nada cambiará lo que hizo ese asesino con mi vida".

“Cuando escucho que la defensa del asesino dice que fue un accidente, me siento morir”

María Fernanda Chaila fue asesinada el 29 de mayo del año pasado, mientras trabajaba en el Predio Ferial, donde funcionan las oficinas de la secretaría de Comunas y Municipios. El asesino de la joven estuvo prófugo hasta el 3 de mayo pasado, día en que fue apresado en Buenos Aires. Ahora, se encuentra detenido a la espera de la decisión de la jueza Ema de Nucci. La fiscal Teresita Marnero solicitó la elevación a juicio oral, bajo la imputación de homicidio agravado.

“Trabajaré para la creación de una fundación porque las chicas que son golpeadas están desprotegidas. Yo lo viví en carne propia, muchas veces hice la denuncia, en la policía tomaban nota y me volvía a mi casa. Así, sin darme cuenta, llegué a lo que hoy me toca vivir”, dijo Mary Ahumada, entre sollozos, recordando a María Fernanda.

La madre de la joven se entristeció mientras reaccionaba respecto de que nadie le devolverá a su hija, más allá de la condena que reciba el “gardelito”, imputado por el hecho. El mismo Lucas González, admitió en su declaración ante la fiscal, haber sido autor del disparo que terminó con la vida de su ex novia. Sin embargo, los abogados del delincuente intentaron dar cuenta que se trató de un accidente. “Escucho esas palabras y parece que muero”, sentenció Ahumada.

María Celia Nahra