El rector de la Universidad Nacional de Tucumán Juan Alberto Cerisola, inauguró ayer las obras del Instituto de Microbiología de la Facultad de Bioquímica, Química y Farmacia, donde se acentuó la seguridad de las instalaciones, cumpliendo con la normativa actual nacional, en una inversión que asciende a los 200 mil pesos.
Se efectuaron trabajos de pintura, cambio total de revestimientos, cubiertas y reparación de cielorrasos.
"Se edificó una salida de emergencia lateral, con una escalera metálica exterior que cubre los tres pisos del edificio, y se colocaron puertas con barrales antipático que se abren al contacto", detalló el Rector.
"La seguridad es un aspecto fundamental, y se está implementando en cada una de las obras que efectuamos, nadie quiere repetir la triste experiencia de Río Cuarto. Lo lamentable es que la mayoría de las universidades argentinas no cuentan con fondos extra como los que posee la UNT, debido a YMAD, y están muy limitadas en sus posibilidades", dijo Cerisola en alusión al luctuoso incendio que se produjo en 2007 en un laboratorio de la universidad de esa ciudad.
Cerisola puntualizó que estas obras se encararon mientras se avanza paralelamente en el diseño del nuevo edificio de la Facultad de Bioquímica, que será trasladada íntegramente al predio del Centro Herrera (conocido como Quinta Agronómica).
Según la Secretaría de Planeamiento, Obras y Servicios, se estima el traslado en un plazo mínimo de dos años.
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