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AMPLIARProcesión con Niño Alcalde en el Barrio Alvear

Emotiva ceremonia del Tinkunaku en Concepción

El pasado 31 de diciembre en la Casa Quinta , de Concepción, se realizó la tradicional ceremonia denominada Tinkunaku. Un topamiento de las imágenes de San Nicolás y del Niño Dios Alcalde.

Participaron el Obispo de la Diócesis Monseñor José María Rossi, los sacerdotes Miguel Soria y Adrián Valdéz y el secretario Municipal Carlos Di Santolo.

Un Encuentro (Tinkunaku en idioma nativo) entre ambas imágenes provenientes de los barrios Alvear, Independencia, San Andrés y Unión que recorren en procesión las calles de la ciudad hasta que “se encuentran”.

Una vez juntas la imágenes en un lugar común se realiza la ceremonia. Cabe aclarar que no consiste en un acto litúrgico, aunque tiene gran significación en la historia latinoamericana.

En Concepción realizaron tres flexiones (de rodillas) ante la imagen del Niño Dios Alcalde y luego el secretario de gobierno le entregó al Niño Dios Alcalde las llaves de la ciudad en señal de subordinación. Seguidamente el obispo le entregó una Biblia al funcionario municipal y le dijo estas palabras: “Con esta Ley queremos ser gobernados”.

La ceremonia tiene sus orígenes en La Rioja en la época de las encomiendas. El maltrato a los nativos se hacía cada vez mas cruento y estos estaban a punto de sublevarse. Entonces intervino San Francisco Solano que andaba por estas tierras y habló con los nativos. Estos le dijeron que sólo se someterían a la autoridad de Jesús y sus enseñanzas. De esta forma nació el Niño Dios Alcalde que tomó la figura de una autoridad civil. Desde entonces se renueva esta ceremonia con los gestos que se realizan cada fin de año al mediodía: la entrega de las llaves de la ciudad por parte de las autoridades al Niño Dios Alcalde y la entrega de la Biblia a las autoridades para “ser gobernados por esta Ley”

“Esta ceremonia nos enseña a doblar las rodillas ante Jesús solamente como lo hace San Nicolás, obispo. Nos arrodillamos ante Dios no ante ningún poder de la Tierra. No sólo eso, sino que reconocemos que somos hijos de Dios y por eso no podemos arrodillarnos a otro poder” enfatizó el Obispo Diocesano al comenzar la ceremonia religiosa.

Una multitud proveniente de distintos barrios de Concepción participó del acto religioso.