Con el hallazgo de restos óseos de 15 personas en el ex Arsenal Miguel de Azcuénaga y los restos del ex senador Guillermo Vargas Aignasse el hecho de que hubo un genocidio es cada vez más claro. La esperanza de los familiares de enterrar a sus muertos, la posibilidad del duelo. Las mentiras de que hubo una guerra se esfuman.
El martes a la noche el Juzgado Federal Nº 2, a cargo de Fernando Poviña (h), le comunicó a la familia el resultado de una pericia científica que confirma que restos encontrados, en el Pozo de Vargas, corresponden al desaparecido ex senador provincial, Guillermo Vargas Aignasse. Según este estudio, los extractos de sangre de tres hijos del ex senador, María Marta, Guillermo y Mariana -hermanos de Gerónimo- coinciden con el ADN del segundo metatarsiano de un pie derecho, en un 99,9%.
En esa causa, cuyo juicio oral se desarrolló en el 2008, fue condenado Bussi a cadena perpetua. La noticia de semejante confirmación alegró y alivió, en parte, al conjunto de la sociedad. Dando la sensación que la Justicia llega, aunque sea tarde.
La otra gran novedad fue la confirmación de que en el ex Arsenal Miguel de Azcuénaga existen fosas comunes. Con esto se desenmascara las mentiras del genocida de Bussi. Durante su declaración en el 2010, durante la Causa Jefatura de Policía, dijo que en Tucumán en los años 70, se libró "una guerra declarada por un gobierno constitucional" y agregó que, durante aquellos años, "nadie reclamó por los muertos en combate, ni siquiera los miembros de las propias organizaciones subversivas".
A su vez añadió que "a muchos de los muertos fue difícil identificar, porque fueron tragados por la espesura del monte o por las tácticas desplegadas por las propias organizaciones guerrilleras, como los cementerios clandestinos o las fosas comunes, para evitar que se conociera su identidad", dijo Bussi. Así mismo indicó que los subversivos enterraban a sus muertos en fosas comunes, les sacaban las huellas dactilares, por eso se hace difícil precisar la cantidad y quienes eran.
Siempre los comunicados de los militares daban cuenta de enfrentamientos, sin embargo las bajas eran de las organizaciones políticas, nunca de las fuerzas de seguridad.
Con el hallazgo de restos de 15 personas en ex Arsenal, las barbaridades de Bussi y sus colegas se hacen agua.
El ex Arsenal fue el mayor centro clandestino de detención de todo el NOA. Durante el debate oral de la Causa Jefatura, el testigo Osvaldo Pérez declaró que "en el Arsenal fusilaron entre 800 y 1000 personas". Pérez estuvo detenido durante un año en ese infierno. También aseguró que lo vio a Bussi y Zimmerman entrar a ese antro de torturas. Relató las condiciones a que eran sometidos los detenidos. Vio morir a compañeros. En varias oportunidades “sentí olor a carne quemada”, destacó.
Según se informó ayer desde el Juzgado Federal Nº1, a cargo de Daniel Bejas, lo restos encontrados están “parcialmente quemados, ubicados en diferentes profundidades y con distintas orientaciones, en la mayor parte de los casos dispuestos en relación anatómica. Como elementos asociados a los restos óseos se hallaron: proyectiles de armas de fuego, restos de ropa y calzado”.
Estos hallazgos se produjeron a partir del 25 de noviembre, con “huesos completos no asociados, y continuando con la excavación pericial se descubrió lo que fuera una fosa común con la presencia de cuerpos completos en diferentes posiciones, varios de ellos atados en las extremidades superiores, algunos con presencia de proyectiles de arma de fuego y vainas asociados directamente”. Además el informe establece que “los cuerpos hallados se encontraban ubicados como cayeron”. Se indaga que “la fosa habría sido de quema atento la presencia de círculos de neumáticos y rastros de combustión en los cuerpos, pero no habría concluido por razones desconocidas. Al parecer la fosa peritada habría sido abierta con pala en forma manual. La evidencia hallada permitiría suponer que fue el lugar de ejecución”, concluye el escrito.
Con estas dos noticias la verdad es más palpable. Una etapa de la oscura historia de Tucumán comienza a aclararse. La esperanza de que familiares puedan por fin enterrar a sus muertos con el duelo correspondiente está más cerca.
Sebastián Ganzburg
Todos los derechos reservados Copyright 2007
Terminos y usos del sitio
Directorio Web de Argentina
Secciones
Portada del diario | Ediciones Anteriores | Deportes | Economia | Opinion|Policiales
Contactos
Publicidad en el diario | Redacción | Cartas al director| Staff