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AMPLIARTambién se niegan a salir de la plaza

Los ambulantes no quieren abandonar el microcentro

A pesar del anuncio de un megaoperativo para erradicar la venta ambulante, los puesteros se ubicaron en las puertas del Mercado del Norte. Utilizan diversas maneras para escapar de los controles que realizan los inspectores municipales. Los trabajadores informales aseguran que no se trasladarán al Predio Ferial Norte. Escasa presencia policial.

Las Fiestas de Fin de Año podrían convertirse en una batalla campal.

"Si quieren que nos vayamos de aquí, que nos den un trabajo. No le hacemos mal a nadie y necesitamos llevar el pan a nuestras casas. Los inspectores municipales cuando no pueden "sacarte" nada, te quieren apurar", disparó Marcelo, un puestero ubicado en la puerta del Mercado del Norte sobre calle Maipú.

Los inspectores municipales, en un trabajo conjunto con la policía de la provincia, intentaron poner en marcha ayer un operativo de erradicación de venta ambulante. Pero el intento se convirtió en un verdadero raid de puesteros que, durante toda la mañana, escaparon de las camionetas del municipio que anunciaban la llegada "del enemigo".

Según lo anunciado por funcionarios municipales, incluso por el mismo jefe de policía, para las fiestas de fin de año "no quedará un solo vendedor informal en la vía pública". Pero el objetivo se convirtió prácticamente en una utopía: los ambulantes agrupados en el sindicato que lidera Luis Lobo no cederán terreno en una oportunidad única para "hacer diferencia".

 A pesar de las promesas de adaptar el predio Ferial Norte par trasladar a los puesteros a ese lugar, la realidad sigue enfrentando a los vecinos con los cajones de tomates y discos truchos, que impiden su paso. Pareciera que, una vez más, la promesa de una ciudad limpia será solo eso: una promesa.

María Celia Nahra