Así lo aseguró el cirujano Lister Astudillo, durante una entrevista con TucumánHoy. El profesional que tiene 27 años de especialización y forma parte del equipo de Trasplantes de Hígado que funciona con éxito en el Sanatorio Rivadavia.
La cirugía y el mountain bike, son ámbitos en los que se mueve semana a semana.
“A principios de los setenta todavía se hablaba con pasión del mayo francés, las ideologías estaban a flor de piel, y en algún punto de mi historia y, será `porque me quedó impreso alguna sugerencias de mi padres, me volqué a estudiar medicina, no sin antes pensar en la antropología que era lo que más me tiraba en esos años” señala el cirujano del Equipo de Trasplante de Hígado del Sanatorio Rivadavia.
Egresado a los 23 años, Astudillo dice con seguridad que en aquellos años, “las ideologías de aquella época eran más arraigadas que las que tiene esta generación. Siempre pensaba, desde lo humano, en que algo podía cambiar si podía ser útil”. Y desde que comencé en la facultad sabía que mi objetivo era la cirugía. Para mi tengo toda la pasión médica puesta en la cuestión quirúrgica. Amo la cirugía, 25 años de cirujano y sigo como siempre”.
Lister Astudillo, especialista en Gastroenterología y Laparoscopía , asegura “hay muchos prejuicios en esta técnica, que tiene más de 20 años, siguen en la conciencia ciudadana retórica , los pruritos, que tienen que ver con el principio de toda esta técnica”. Incisiones
Laparoscopia es lo máximo que le pasó a la cirugía , nada cambio tanto como este sistema, es una cirugía mininvasiva porque son mini incisiones de un centímetro con la introducción de una ótica con una cámara de video y la imagen real aparece aumentada 10 ,12 veces en un monitor , y es como tener el ojo dentro del abdomen. Con esto trabajo con un acercamiento superior a la cirugía a “cielo abierto”, porque estoy trabajando a 30 centímetros del órgano, y con la técnica lo veo a un centímetro”.
“Los prejuicios, cada vez menos, con esta técnica es porque el paciente tiene miedo a las complicaciones y todos los cirujanos sabemos que no existe ninguna cirugía de ningún tipo, a cielo abierto y laparascópica, que no pueda tener complicaciones, cualquiera desde la más simple a la más compleja puede complicarse”, asegura el doctor Astudillo.
No es el abordaje laparascópico el causante de complicaciones sino que es una vía de abordaje excelente., que va en beneficio del enfermo, no daña la pared abdominal, es de rápida rehabilitación , no tiene necesidad de acompañarlo ni siquiera para ir al baño porque el operado no tiene nada que se le pueda abrir. Puede toser , estornudar, reirse , resbalar y caerse y no es posible que se le habran los tejidos porque no tiene abierto más de un centímetro. Después de 20 años como técnica muy segura , hay cirugías que ya no se hacen por otra vía que no sea esta técnica. Ya no se discuten ni la vesícula ni los , reflujos gastrosofagico de hiato , hernias de hiato, hay una cantidad de patologías que no se discute , y tiene que ver con este mínimo abordaje que favorece enormemente al enfermo”, dice con mucho fervor el biker.
Desde su aparición en Francia en 1987 la curva de aprendizaje llevó mas de 10 años, y ahora en el mundo, en el abdomen casi no queda nada sin haber hecho el abordaje laparascópico.
Tucumán no esta ajeno a esto, hay muy buenos cirujanos laparascópicos con técnicas avanzadas, se hacen en el hospital público como en llos establecimientos privados.
Luego de más de una hora de charla el cirujano Lister Astudillo, cuenta que la adrenalina de un cirujano baja en el acto quirúrgico, cuenta el médico especializado en trasplante en Pittsburg, EEUU.
Al cirujano recibido en 1980 que tres veces a la semana los senderos de los cerros tucumanos , lo ven trepar con su bicicleta y sortear dificultades con menos precisión que cuando opera, lo que le valió darse varios palos. Pactica mountain bike hace 7 años y cada día lo lleva a mas entrenamiento, para poder estar entre los primeros de su categoría. “ Es un deporte muy competitivo lleno de exigencias físicas y mentales”, dice Lister Astudillo.
“En la medicina todos se dan la mano, nace una motivación personal. No motiva solo aliviar el dolor. Todo tenemos algo de adentro que nos motiva a hacer y si eso hace un bien ,lo demás es fabuloso Todos los pacientes tienen algo diferente, siempre hay creatividad, con limites, dado por las técnicas desde lo que ya se sabe que funciona” señala con orgullo este médico cirujano que como tantos habitantes de Tucumán, día a día desde la cotidianidad de su profesión hace que muchas personas sigan disfrutando la plenitud de la vida.
Daniel A. Villalba
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