Ayer, a las 10 de la mañana se presentó a declarar el hombre que estuvo prófugo de la justicia durante un año. Luis Fernández se encuentra imputado por homicidio agravado, al igual que su hermana Nélida y Susana Acosta, ambas detenidas. La familia del sospechoso sigue de cerca todos los pasos de la justicia en el marco de esta investigación. “A mi papá lo mantiene en pie la verdad, dijo su hija.
"Siempre luchó por una causa justa, los derechos de sus compañeros”, dijo la adolescente.
Desde el momento en que la fiscal Adriana Giannoni encontró una vinculación directa entre Luis Fernández y Ángela Beatriz Argañaraz, la docente desaparecida el 1 de agosto del año pasado, los hijos del ex empleado de la Mutualidad estuvieron muy expuestos a los medios de comunicación, defendiendo al imputado incondicionalmente.
Desde que decidió entregarse a la justicia, los jóvenes acompañan a su padre diariamente a Tribunales y se encargan de desmentir, hasta el cansancio, que Luis Fernández nada tiene que ver con la desaparición de la docente. “Ahora estamos luchando para que sea controlado diariamente por su diabetes severa”, explicó María José Fernández en diálogo con la prensa.
A su vez, la joven manifestó que no ve a su tía, Nélida, desde el pasado mes de diciembre y que del avance de la causa y la vinculación o no con el hecho que se investiga, nada pueden decir. “Nosotros solo podemos hablar por mi papá, la información relacionada a mi tía, la conoce solo el doctor Morales”, aseguró.
María Celia Nahra
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