En Tucumán finaliza hoy el XXIV Encuentro de Mujeres un espacio amplio donde abundó la diversidad de temas, siendo el más polémico, el del aborto. Esto generó una polarización importante en parte de la población. Los que están a favor y los que están en contra.
Por Sebastián Ganzburg
Quienes están a favor justifican su posición al argumentar que la mayoría de las mujeres que mueren por aborto son pobres. Además consideran fundamental que exista educación sexual en las escuelas y “anticonceptivos para no morir”.
En nuestro país el aborto es ilegal. Lo cual se traduce en miles de muertes de mujeres por año. Más allá de las cuestiones éticas y religiosas, que aseguran que abortar es matar, lo cual nadie niega, el aborto es una práctica que existió, existe y existirá. Nos guste o no. No creo, que nadie esté a favor del aborto como práctica corriente. Cosa que no se propone, simplemente se trata de sacarnos las caretas de legalizar algo que es real. De no mentirnos. De dejar, de una buena vez por todas, ser tan hipócritas.
Mueren las pobres
No es mi idea opinar desde una posición marxista, nada más alejado. Sin embargo es incuestionable que la mayoría de las mujeres que mueren por aborto son pobres. ¿Por qué?, muy simple, quienes realizan esta práctica y pertenecen a sectores medios o acomodados, acuden a “clínicas” con infinitamente superiores condiciones sanitarias e higiénicas que aquellas que no disponen de recursos económicos.
Las mujeres que están a favor de la legalización del aborto dicen: “anticonceptivos para no abortar, aborto legal para no morir”. Esto según explican debe ir acompañando indefectiblemente de educación sexual en todas las escuelas.
Lo paradójico, la iglesia
La iglesia católica es la institución que más firmemente se opone a que el aborto sea legal. La misma que se opone al uso de preservativos y anticonceptivos. La misma que durante la inquisición perseguía a las mujeres, y, “por brujas” las mandaba a la hoguera. La misa que tiene un Dios hombre. La misma que no permite que en los cargos jerárquicos principales haya mujeres. La misma que apoyó el régimen fascista, nazi y todas las dictaduras en América Latina
El problema principal radica en que nuestra sociedad es irracionalmente machista, por eso me pregunto si los hombres pudiéramos concebir hijos, ¿el aborto sería ilegal? Poco probable.
Sebastián Ganzburg
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