Un clima espectacular para el debut del santo en este nuevo torneo que hace disputar la AFA, una de las instituciones más criticada en los últimos días. San Martín con todas sus galas abrió las puertas, de su remozado estadio, a más de 20 mil personas que llenaron de rojo y blanco las tribunas. Carteles de algunos candidatos competían con los “ trapos “santos. Los niños en su día lucían con orgullo las camisetas de uno de los grandes del Jardín de la República.
Un día especial para los más bajitos, que del partido no entendían mucho pero que gritaban imitando a los padres que largaban en la cancha las frustraciones de la semana.
Opositores y oficialistas, hermanados en la pasión futbolera, saltaron y gritaron cuando Juan Monge (más delgado), en medio del área chica empujó la pelota para convertir el único gol del mediocre partido.
De ahí en más todo se fue cayendo hasta convertirse en un encuentro tedioso, solo con algunas llegadas, pero con más fervor que fútbol.
San Martín logró un triunfo tranquilo, sin sobresaltos. No mostró más que en los últimos partidos del Clausura, pero comenzar ganando es bueno.
Debe mejorar y mucho, como seguramente lo harán los rivales. Las nuevas incorporaciones, salvo Caffa, son más de lo mismo.
Daniel A Villalba
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