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Se hizo la luz, iluminación del Cristo de San Javier

Es uno de los monumentos más impactantes de la provincia, sin embargo, dentro de la oscuridad en la que se sumerge el cerro cuando al atardecer empieza a asomarse, esta construcción también parecía esconderse junto al sol. Es por eso que, a principios de año, en el Ente Tucumán Turismo se aprobó un proyecto para renovar totalmente la iluminación del Cristo Bendicente.

Fue creado como símbolo de paz hace ya 65 años (1942) por el artista tucumano Juan Carlos Iramain .Estaba la Segunda Guerra Mundial y el objetivo era convocar a cristianos de todo el mundo a rezar por la paz y la reconciliación. En el año 2001 fue declarado  Bien de Interés Histórico Artístico mediante la ley 25.417.

Sin  embargo,  su deteriorado estado y la carencia de una buena iluminación lo fueron convirtiendo en una curiosa estatua inmersa dentro de la majestuosidad del Cerro San Javier. Ya en el 2003 tuvo su restauración a cargo de Turismo pero seguía sin poseer el resaltamiento que debía. Es por esto que el próximo  9 de agosto  cuando las nuevas lámparas comiencen a desparramar su luz por San Javier esta construcción obtendrá el valor y el impacto que merece.

Para llevar a cabo este emprendimiento Philips donó los productos (proyectores, lámparas y equipos auxiliares) y los materiales eléctricos necesarios, mientras que el costeo de mano de obra y la alimentación eléctrica estuvo a cargo de EDET. 

La instalación interna consiste, según el departamento de Planificación del Ente Tucumán Turismo , en el montaje de 24 luminarias estratégicamente distribuidas: 17 artefactos Tempo3 de 400w marca Philips y 7 artefactos Arena Vison de 2000 watts de la mimas marca. Los mismos estarán ubicados en el pedestal, al frente, por los costados y se utilizarán 5 al nivel de la espalda para causar el efecto de una especie de halo lo cual le otorga una clara connotación religiosa.

“Es un proyecto sumamente interesante desde el punto de vista de la revalorización del patrimonio turístico de la provincia y que refuerza justamente los objetivos planteados por el Ente para este año ya que nos habíamos determinado priorizar y jerarquizar el circuito de Yungas y precisamente un punto clave del mismo es el Cristo y su entorno”, señaló Silvia Kauffman, jefa del departamento de Planificación del organismo.

El Cristo es una obra emblemática, no sólo para los tucumanos sino que su reconocimiento trasciende las fronteras de la provincia. Se trata de un referente turístico que por sus características y su envergadura (28 metros de altura y 135,8 toneladas de peso) se ha posicionado como un atractivo de visita ineludible desde su inauguración.

Grandes expectativas se generan en torno a esta nueva iluminación, y con ella los alrededores de este importante atractivo turístico y el mismo San Javier brillarán con luz propia.