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AMPLIARPlaza Independencia, luego de los actos

9 de Julio con frío en las calles y calor en la Casa Histórica

Desde las 7 de la mañana el microcentro tucumano estaba poblado por numerosos policías y escasos ciudadanos. Cuando la sensación térmica era de 2 grados bajo cero, el gobernador José Alperovich acompañados por autoridades y funcionarios provinciales estuvieron el acto de izamiento de la bandera. Posteriormente estuvo en el Tedeum. Muestras de cariño al presidente y su esposa cuando llegaron a la Casa de Tucumán.A la hora 0 se entonó el Himno Nacional.

En el primer minuto del día patrio más importante del país, la calle Congreso segunda cuadra estaba ocupadas por ciudadanos de distintos lugares de la Argentina.

La Casa Histórica, con sus puertas recuperadas parecía, más imponente cuando los flashes de las cámaras de numerosos turistas reflejaban ese momento inolvidable. El frío era menor ante el fervor de la gente entonando las estrofas del Himno Nacional. Al final los fuegos de artificios iluminaron esplendorosamente el cielo, empecinado en  demostrar su oscuridad.

A las 8,30  el gobernador José Alperovich acompañado por funcionarios y autoridades provinciales, presidió el acto de izamiento de la bandera. Luego se trasladó a la iglesia Catedral donde escuchó la homilía de Monseñor Luis Villalba. El frío se  sentía en el interior al igual que en las calles del  microcentro, ocupadas por innumerables policías.

Por  calle Congreso, frente a la Casa Histórica , comenzaron a instalarse, detrás de las vallas un gran número de ciudadanos argentinos, esperando saludar al Presidente y su esposa. Ex Combatientes de Malvinas uniformados y con banderas, ferroviarios con bombos y pancartas, turistas con filmadoras y cámaras fotográficas, policías de civil y uniformados y numerosos periodistas daban un colorido al Paseo de la Independencia. El frío hacía  a bailar al compás de los ferroviarios bombistas.

La espera se hizo larga. Cerca de las trece comenzaron a retirarse numerosos turistas, rumbo a los cerros anoticiados de la nieve que estaba cayendo.

Cuando aparecieron los motociclistas en contramano por Crisóstomo Álvarez , comenzó el despliegue de todos los apostados en espera de la llegada Kirchner. Los vehículos subieron por el Paseo hasta detenerse en la puerta del solar histórico. En pocos segundos el Presidente se acercó a las vallas para saludarse con todos los que estaban detrás. Besos, abrazos, apretones de manos y todo los que sucede cuando el primer mandatario nacional realiza este tipo de manifestaciones.

Posteriormente la senadora Cristina Fernández acaparó los saludos cuando se detuvo a firmar una bandera que portaban ex Combatientes de Malvinas, que fueron saludados uno por uno por la candidata presidencial. Todo fue rápido, el ingreso por calle Congreso el acto en el interior de la Casa Histórica y la posterior salida por calle 9 de Julio de toda la comitiva presidencial.

A las 14 la sensación térmica estaba por debajo de un grado, la Plaza Independencia y sus alrededores comenzó a recobrar el ritmo habitual. Se sacaron las vallas, los policías se desconcentraron, y los bares cercanos  se poblaron de todos aquellos que buscaban calor por fuera y por dentro.

Daniel A. Villalba