La desafectación de 27 inmuebles de la ley de Activo por activo para su posterior venta, nos pone a los vecinos de Yerba Buena en estado de alerta ya que hemos sufrido antes situaciones límites como la casi demolición de la casa Christie.
Una vez más la peligrosa ambición inmobiliaria del gobernador nos encuentra a los ciudadanos totalmente indefensos ya que hasta el día de la fecha ni el Intendente ni los concejales han expresado preocupación alguna por el tema.
Al dirigirme a verificar algunas de estas propiedades he constatado-salvo que existiere algún error en las direcciones- que algunas de las parcelas que desafectó el ejecutivo a través del decreto 56/3 (ME) y -que si no protestamos todos- van a vender; son espacios verdes, una plaza con un caps, el fondo de un comedor infantil y una asociación civil.
Pareciera que los ministros que firmaron este acuerdo no se dan cuenta que nuestra ciudad necesita más espacios públicos en donde los niños y jóvenes puedan disfrutar al aire libre, practicar deportes y tener la vida tranquila que elegimos los que buscamos en esta ciudad jardín el hogar para nuestros hijos.
Primero quisieron vender nuestro patrimonio histórico, hoy hipotecan el espacio verde de los habitantes de Yerba Buena, mañana tal vez sea la Hoya o el Parque Percy Hill. En una provincia en donde se viene publicitando como logro de gestión un continuo superávit fiscal, no entiendo el doble discurso de querer justificar este decreto con la patética excusa de que el dinero de dicha venta será destinado a comprar maquinarias vial, tal vez en un futuro cercano intenten vender el cerro San Javier y digan que lo hacen para solventar las obras de cloacas que tanto necesitamos.
Ante la inminente aprobación de este decreto hemos presentado junto a otros vecinos una nota al Legislador José Cano quién a raíz de nuestra denuncia solicitó un pedido de informes pormenorizado de dichos inmuebles y la anulación del decreto en cuestión.
El Gobernador tiene que entender que los bienes del Estado son del pueblo y no del mandatario de turno y los legisladores oficialistas deberían tener un poco de dignidad y defender los intereses del pueblo que los eligió.
Debemos poner freno a este remate del patrimonio de todos los tucumanos. Tucumán no se vende.
Pedro Albornoz Piossek
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