El reconocido medico sanitarista y fogoso dirigente político critica a Macri por el interés manifestado por el presidente de coptar a la dirigencia del peronismo. También cuestiona la visión colonial del mandatario. Imperdible.
Detalles.
SR. MAURICIO MACRI
No
quiero ser hipócrita, así que comienzo sin rituales innecesarios.
Usted ha sido elegido Presidente de los argentinos por escaso margen, sin que
el peronismo derrotado haya provocado escándalos, por supuestos fraudes, como
acostumbró hacerlo usted en Tucumán, por ejemplo.
Sin embargo usted, desde ese mismo momento ha encontrado en el peronismo su
“objeto del deseo”, intentando transformarlo en mala palabra, denigrando,
insultando y queriendo borrar su memoria.
Se equivoca o no leyó la historia, lo más probable, pero esas acusaciones que
realiza las recibieron desde Perón y Evita a Discépolo y Ramón Carrillo, Hugo
del Carril o Nelly Omar, hoy íconos nacionales de compromiso con el pueblo.
Sabe el pueblo que la frase “atrapen al ladrón” es para que todos miren al otro
lado, mientras usted y su equipo se dedican al saqueo de los dineros públicos,
extorsionando y comprando voluntades volubles o corruptas.
Esto que parece atrevido, se corona con el endeudamiento externo que acuesta
otra vez la Argentina a los vaivenes provocados por el FMI y los Buitres que
revolotean por el mundo, saqueando sus recursos y vaciando la Soberanía.
Si quiere enterarse como es la película, por si no se acuerda del 2001, estudie
Grecia, Portugal, España, Irlanda como ejemplos de debacle similar al que usted
está provocando.
Puede también estudiar Islandia, un país que salió de la crisis del 2008,
procesando los banqueros y nacionalizando la banca, por supuesto ocultado por
la prensa adicta que le escribe el diario de Irigoyen.
Pero usted insiste en su esquema y agrega aquello que ahora está ejecutando: la
represión, el camino es inexorable, claro que usted no tiene problemas ya que
vivir en Italia, el día de mañana y sin remordimientos, es buen destino.
Enfrentar en forma despiadada a Milagro Sala, coya, pobre, negra que demostró
que puede ser más eficiente que los blancos rubios, desató su odio racial
ancestral, junto a un radicalismo claudicante, entregado por tres monedas.
Pero lo que más preocupa, es como usted desprecia la Patria, desde YPF hasta
las Islas Malvinas, desde la apertura de importaciones a la firma de Tratados
claudicantes, entregando las decisiones soberanas a los centros de poder
internacional.
Lo que usted ignora, es que el pueblo argentino tiene memoria, que el peronismo
además, aunque usted no lo sepa, tiene además de pueblo, doctrina, ideología y
filosofía que justifican su permanencia en 70 años de historia.
¿Sabe como hizo el peronismo? Básico, se ocupó de los pobres, los desposeídos,
los trabajadores, trabajo que usted desprecia y se ocupa de los ricos, los
famosos y los extranjeros blancos, despreciando los “hermanos latinoamericanos”
que generan nuestras riquezas.
Usted a lo mejor cree que las alabanzas que recibe diariamente, indican que va
bien. Malas noticias, no sólo se está ganando un odio generalizado, sino un
rencor profundo de cientos de miles de familias que han visto tronchar sus
sueños, terminar sus proyectos de vida.
Ha sido usted, no le eche la culpa a nadie, menos a la pesada herencia que ya
no le sirve ni para rematar un discurso, mucho menos perseguir a Cristina, ni
usar a Bonadío para sus tapas de Clarín, es usted quien cargará frente a la
historia este desmadre.
Menos aún trate de sacar patente de “honesto”, tanto usted como su familia,
como los Ministros que lo acompañan, son la imagen viva de los ladrones de
“guantes blancos”, desde el siglo XlX en el caso de su familia materna con las
tierras robadas a los pueblos originarios y al Patria Contratista en las
dictaduras por vía paterna.
Si usted fuese un “hombre de bien”, como se conoce en sus círculos empresarios,
como lo “políticamente correcto”, admitiría su incapacidad y que fue producto
de una manipulación de intereses externos, que lo fabricaron como personaje,
hace años.
Lástima que encima aprendió poco, sigue siendo alumno aplicado de sus mandantes
y en ese periplo ha puesto a la Argentina en zona de riesgo, ante un conflicto
internacional al aceptar instalar Bases Militares Norteamericanas y comprar
armas ofensivas.
El pueblo argentino está sufriendo por su culpa, la Patria está postrada por su
acción cipaya, la economía se incendia por su apertura complaciente, el país
está nuevamente endeudado, en final es previsible, Sr. Presidente.
Los peronistas fuimos elegidos para ser oposición, los gremialistas para
defender sus derechos laborales, los científicos repatriados volvieron para
investigar, no para mendigar, las PYMES quieren trabajar y están cerrando, los
trabajadores, despedidos. Ese es nuestro rol, el suyo debería ser defender la
Patria y no lo está haciendo.
En sólo 15 meses usted hizo este desastre, y encima está orgulloso de eso, por eso como argentino y peronista, ni lo respeto ni lo trato como adversario, sino como verdadero entregador de la Patria y del Pueblo.
Panamá Papers, HSBC, Correo, dólares a futuro, Shell, blanqueo familiar, entre otras perlas, mas las escuchas inconstitucionales, hacen de su gobierno, una patética similitud de autocracia. Del drama a la comedia, es como se repite la historia.
No lo saludo, ni me despido con frases hipócritas
Jorge Rachid
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