Rafaela Isabel Espindola vive en la localidad del sur provincial envió su carta a dos emisoras de FM. Sólo en una de ellas la leyeron parcialmente.
Por tratarse de un testimonio que no debe perderse en el papelerío de los medios, aquí va su texto completo.
Espero que usted puedan leerme estas palabras desde éste mi humilde lugar opino como cualquier ciudadano común le ruego sepa perdonar mi ignorancia; “yo particularmente” ESTOY A FAVOR DEL GOBIERNO.
Soy una mujer criada detrás de los últimos matorrales a 17 Km. de acá, en medio de la nada, en el campo con vecinos más cercanos aproximadamente 1 Km. de distancia; caminaba 5 Km. para concurrir a la escuela “Cristóbal Colón” de Taco Rodeo.
Teníamos terrenos donde mis padres se dedicaban a la cría de ganado, cerdos, ovejas, cabras y labranzas, maíz, trigo, batata y otros. Cosechaban tunas, hacían miel de caña; entonces no se sentía la pobreza.
Después empezaron los agropecuarios a tomar los campos, los compraban, comenzaron a vendernos nuestros animales les estorbaban, cabras que pasaban a sus campos la mataban, igualmente vacas, cerdos, caballos. Y así fueron acosándonos, empobreciéndonos cada vez más hasta no dejar alternativa, ya no teníamos campo para seguir viviendo y ahora la pegunta ¿qué hacer?... emigrar, tratar de sobrevivir, Buenos Aires dicen que hay trabajo, puede ser pero te olvidas que sos una persona, perdes los sueños, las ilusiones, perdes la dignidad de persona… y estos POBRECITOS AGRICULTORES que hoy protestan te compraron tus terrenos a $ 600 por hectárea, es lo que pagaron; yo estoy con el Gobierno, mejoró las ciudades, construyó viviendas, mejoró caminos y rutas, hizo módulos en las casas de la gente humilde, se acordaron de los viejos, nuestros abuelos desamparados de 70 años que con sus manos ya no podían trabajar, el gobierno les otorgó una pensión, no será la gran plata, pero es una ayuda.
Yo no tengo jubilación ni pensión. Tengo un 80 % de invalidez, debo incorporarme día a día a veces con ayuda, uso un bastón, mi rutina: bañarme, vestirme, llegar a cocinar apoyándome en la mesa y trabajar: preparar comida, lavar ropa para afuera, con una mano me apoyo en la pileta y con la otra lavo, tengo una hija adolescente que mando a la escuela, está en 4º año, es por ella que todavía me aferro a la vida.
Hace seis años hice los trámites para una pensión cosa que no me otorgaron porque estaba enganchada en el AFIP por haber sido productora tabacalera 14 años. Si los pobres productores me piden la firma a mi, NO SE LA DOY, porque ellos todos estos años demasiado se aprovecharon de nosotros sacándonos nuestras tierras, aprovechándose de nosotros y hoy “NOS QUIEREN MATAR DE HAMBRE, YO SE, NACI POBRE, ME VOY A MORIR POBRE…Yo de los políticos no recibí ayuda; Soy Peronista hasta la punta de mis zapatas, ellos no lo saben, no me tienen en cuenta, lo poco que tengo lo hice con mucho sacrificio, trabajando toda mi vida y lo sigo haciendo, lo digo con orgullo, lo hice a puro pulmón; padezco de artritis remautode, osteoporosis y secuelas de herpes zóster desde el año 1996. Esta enfermedad estropeo ramificaciones de los nervios del vientre y la pierna, secuelas de por vida y los medicamentos que necesito son demasiados caros, razón de más para trabajar.
Señores un ejemplo claro de lo que hacen los pobres productores lo tienen en la Ruta: La Cocha – Taco Ralo: los terraplenes y montículos de tierra que cubren las fincas y los desagües hacia la ruta para inundar a la gente, los están acosando así no les queda otra que abandonar
Desde ya agradezco a Uds., me lean está nota para que la gente reflexione, no se deje engañar. Basta Ya!!!
Rafaela Isabel Espindola – L.C. 6.658.869
25 de Mayo S/N. La Cocha – Tucumán
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