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Una familia tipo necesita 12.500 pesos mensuales para no ser pobre

En agosto, una familia compuesta por una pareja y dos hijos menores de diez años tuvo que contar con 12.489 pesos para no caer bajo la línea de la pobreza, según informó el INDEC, que volvió a divulgar esta información luego de tres años.

El valor corresponde a la Canasta Básica Total (CBT), que incluye las necesidad alimentarias más bienes y servicios, mientras que la Canasta Básica Alimentaria (CBA), utilizada para saber si una familia está por debajo de la línea de indigencia, arrojó un valor de 5175 pesos.

El informe también evidencia los aumentos de precios en ambos índices, ya que calcula que en abril una familia tipo necesitaba 4679 pesos para no caer en la indigencia y 11.320 para no estar debajo de la línea de pobreza.

El documento también muestra la variación que sufren ambas canastas en caso de que el grupo familiar cuenta con un integrante más menor de edad. En ese caso, la familia necesita 5443 pesos para no caer en la indigencia y 13.136 pesos para no ser pobres.

El organismo adelantó que el 28 de septiembre reanudará la publicación periódica de los resultados referidos a la incidencia de la pobreza e indigencia, en el que cruza los datos de ambas canastas con los ingresos mensuales de cada uno de los hogares relevados a través de la Encuesta Permanente de Hogares (EPH).

La economía cayó 3,4 por ciento en el segundo trimestre y 1,7 en el primer semestre

De acuerdo con los datos difundidos por el INDEC, se registró el tercer período consecutivo de regresión, con una baja interanual de 2,1 por ciento.

La inversión en el segundo trimestre también cayó 4,9 por ciento, baja que se suma a la caída del 3,3 por ciento que se había registrado entre enero y marzo. El desplome de la inversión se verificó con mayor intensidad en el sector de la construcción, que acusó una caída del orden del 15 por ciento.

La oferta global tuvo una baja interanual de 1,2 por ciento en el segundo trimestre, tras una suba de 0,4 por ciento en el primero. La demanda global también cayó un 1,2 por cierno, tras una alza de 2,7 por ciento del primer período del año.

En el desagregado por sectores, el INDEC señala que la agricultura y la ganadería retrocedieron 7,9 por ciento; pesca 15,7; minas y canteras 5,5; industria manufacturera 7,9; construcción 10,2; comercio 2,1; intermediación financiera 5,7 e inmobiliarias, 0,9.

En cambio, hubo crecimientos en el sector electricidad, gas y agua, que aumentó 4,1 por ciento; restaurantes y hoteles 3,1; transporte, almacenamiento y comunicaciones 1,2; administración pública 2,8; enseñanza 1,7, y servicios sociales y de salud 3,3.