La Corte Suprema de Justicia de Tucumán ordenó que la joven Belén sea puesta en libertad. Lo hizo a través de un fallo conocido ayer con la firma de los vocales Antonio Gandur, Antonio Estofán y Daniel Posse.
Belén es la joven que fue condenada en abril a ocho años de prisión por homicidio agravado por el vínculo, por haber sufrido un aborto espontáneo.
Los jueces que la sentenciaron consideraron que Belén (cuya verdadera identidad se mantiene en reserva) tuvo a su bebé en un baño del hospital Avellaneda y que lo asesinó arrojándolo a un inodoro, mientras que la joven, de 27 años, sostiene que se trató de un aborto espontáneo.
La mujer está privada de su libertad desde marzo de 2014.
El máximo tribunal de la Provincia dispuso que las actuaciones vuelvan a la Sala III de la Cámara Penal, que emitió el fallo condenatorio, para que instrumente la liberación efectiva de Belén.
El caso
La mujer fue
condenada en abril por la Cámara Penal, que consideró que llegó a dar a
luz al bebé en un baño del hospital Avellaneda y le provocó la muerte
arrojándolo a un inodoro. Sin embargo, la defensa de la joven sostiene
que se trató de un aborto espontáneo y que ella no sabía que llevaba
adelante un embarazo.
El caso tuvo mucha repercusión en varios
sectores de defensa de la mujer y los derechos humanos, y partidos
políticos de izquierda, que se movilizaron en marchas, a través de
medios de comunicación, entre otros.
La defensa de la mujer y varias organizaciones de derechos humanos realizaron planteos ante la Justicia y el gobierno tucumano para reclamar su liberación y que se vuelva a analizar el caso.
La sentencia generó una fuerte polémica, tan grande como la diferencia que existe entre un aborto espontáneo y un homicidio, que traspasó los límites de esta provincia. Distintas organizaciones sociales marcharon el viernes a la Casa de Tucumán en Buenos Aires, para repudiar el fallo, al que consideraron "un caso de violencia institucional", para exigir la inmediata liberación de "Belén" y reclamar por el aborto legal y gratuito.
El hecho ocurrió en marzo de 2014 y, desde entonces, la joven permaneció detenida, a la espera del juicio, que tuvo lugar la semana pasada, cuando los jueces de la Sala III de la Cámara Penal de Tucumán la condenaron por el delito de "homicidio por circunstancias extraordinarias de atenuación".
En su fallo, los magistrados Dante Ibáñez, Néstor Rafael Macoritto y Fabián Fradejas consideraron que en la investigación quedó comprobado que la mujer tuvo a su bebé en el baño del hospital Avellaneda, lo mató y trató de deshacerse de la criatura arrojándola al inodoro tras cortar el cordón umbilical.
En una primera instancia, la mujer había sido acusada por "homicidio doblemente agravado por el vínculo y por alevosía"; pero los jueces cambiaron la carátula y redujeron la pena al considerar "como atenuante el estado de puerperio en el que estaba cuando ocurrió el hecho". Según consideraron los magistrados, la joven, cuyo nombre real se mantiene bajo reserva por razones legales, actuó en un estado de shock que le impidió tomar conciencia plena de los hechos.
Al declarar ante el tribunal, Belén aseguró que ni siquiera sabía que estaba embarazada cuando fue a atenderse en el hospital por un fuerte dolor abdominal y que allí tuvo "un aborto espontáneo" de un feto de aproximadamente 22 semanas de gestación, tal como indicaba su historia clínica. Según afirmó la mujer, ese fue el diagnóstico que hicieron los médicos cuando la revisaron por primera vez, pero que luego la acusaron de haber tomado fármacos para interrumpir a propósito el embarazo. La versión de la acusada, quien dijo que fue maltratada y degradada por el personal del hospital, es contradictoria con el testimonio de los profesionales que la atendieron.
Todos los derechos reservados Copyright 2007
Terminos y usos del sitio
Directorio Web de Argentina
Secciones
Portada del diario | Ediciones Anteriores | Deportes | Economia | Opinion|Policiales
Contactos
Publicidad en el diario | Redacción | Cartas al director| Staff