AMPLIARMarianela Mirra

28/05/2008 - Teatro

Si Marianela no fuera del norte ¿le costaría menos?

Marianela Mirra tuvo gran repercusión en Gran Hermano, al igual que en Bailando por un sueño. Siempre remándola, pero parece que es una buena táctica para conseguir su objetivo. En parte lo está haciendo, ganó el reality show y genera polémica en el programa que conduce Marcelo Tinelli. Lo hace adrede, según los medios, o es tal cual se muestra, según el público.

La sensación es que si no fuera del Norte Argentino, sería tratada mejor.

Dueña de una mayor formación intelectual que la mayoría de  sus competidoras. Con  humildad, sobria y segura en sus declaraciones Marianela tiene la preferencia del público televisivo.

Esto al parecer no les gusta a los integrantes de ese frío e hipócrita ambiente de la televisión. Algunos que están hace mucho y otros que intentan incorporarse “la ningunean”

Se fue de Tucumán con un claro y preciso objetivo, hacerse famosa. Esto es lo que buscan todos los participantes de esa despiadada muestra de mal gusto y miseria humana como es Gran Hermano. En la casa más famosa, como se la conoce, tuvo, según algunos una clara y precisa estrategia para “sobrevivir” en la mediocre lucha. La tucumana lo logró a pesar de las nominaciones, las agresiones y la discriminación sufrida por varios de sus compañeros y compañeras del reality show. Afuera, en el panel de expertos en Gran Hermano, nadie daba un voto por esa "gordita".  Pero cada vez que aparecía Marianela el rating subía. A pesar  que uno de los panelistas siempre decía cosas muy duras de los tucumanos, como los votospara Bussi. Por supuesto nunca habló de los votos, de sus comprovincianos, a Patti o a Rico.

Marianela Mirra engordó, fue discriminada, atacada y hasta insultada por la mayoría de los otros habitantes de la casa de Gran Hermano. Estuvo varias veces nominada y siguió adentro, mientras sus “rivales del juego”, iban abandonando la casa. Afuera los expulsados decían de todo en su contra. Los medios no le daban mucho valor y  apostaban por Diego. Hasta el conductor “fichaba” en contra. Ganó, salió y siguió igual. Sobria y segura en los “debates”, humilde en los “ataques”. Todo le sirvió para instalarse en esa burbuja en la que viven una gran mayoría de famosos. Talvez con el tiempo sea como ellos, pero por ahora Marianela Mirra sigue igual a lo visto anteriormente.

En su participación en Bailando por un sueño, la historia es parecida. Es cierto, no baila bien, nos está entre las más lindas, pero según los “analistas” de estos programas está realizando el mismo plan que la llevó a ganar Gran Hermano. Calculadora y fría para los “expertos”  de la capital argentina. Lo cierto es que el público, que se equivoca poco y nada le sigue dando su apoyo.

La sensación  como espectador es que a  Marianela Mirra todo le va a costar el doble, por ser oriunda de una provincia norteña. Sería distinto si hubiese nacido unos kilómetros más cerca de la capital argentina.

La competencia por un lugar en la farándula es perversa. Sólo hay que remitirse a la  televisión o a las revistas especializadas. Supuestos e inescrupulosos “dueños” de la verdad, destruyen con mucha facilidad los sueños de cualquier persona  un poquito distinta , que intente trabajar en el ambiente artístico.

Daniel A. Villalba