El abogado de la madre de María de los Ángeles Verón, afirmó que fueron utilizados y llevados hasta La Rioja, con la excusa de que los restos de Marita podrían estar allí, para descubrir algún hecho vinculado a la prostitución o trata de personas. Se descartó que pueda encontrar los restos de la joven tucumana.
Trimarco de a poco, va recuperando la tranquilidad. Gendarmería espera la intervención de forenses.
En Villa Unión (La Rioja), los gendarmes aguardan que peritos forenses especializados intervengan en las excavaciones que se realizan debajo de un monolito, a fin de determinar si se encuentran allí restos humanos y, en caso de ser así, a quién pertenecen. Mientras tanto, Susana Trimarco, mamá de Marita Verón, va recuperando la tranquilidad al tiempo que se descarta que los presuntos restos que se hallarían en el monolito de San Eugenio, pertenezcan a la joven desaparecida en abril del 2002.
“Hasta ahora y por los indicios que tenemos, creemos que en ese lugar (monolito San Eugenio) puede haber restos de otras personas, pero no de Marita. Creemos que a nosotros nos llevaron para ahí porque quien nos llamó es una persona que tiene datos de Marita que no son de público conocimiento”, dijo Carlos Garmendia, abogado de Trimarco.
El informante, presume el letrado, sería alguien vinculado o con estrecho conocimiento de la práctica de la prostitución y tal vez del tráfico de personas en esa provincia. Sin dudas, el método de llevar a Trimarco hasta allí no fue el mejor, teniendo en cuenta que hasta ahora siempre se buscó a Marita viva.
María Celia Nahra
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