Lo dijo el rector Juan Cerisola, en el acto realizado en commemoración del 25 de Mayo de 1810.
La Universidad Nacional de Tucumán celebró su aniversario número 94 y conmemoró la Revolución de Mayo de 1810.
El rector, Juan Alberto Cerisola y la vicerrectora, María Luisa Rossi de Hernández, presidieron el acto y destacaron el crecimiento de la institución. “Lejos de ser una entidad envejecida, la Universidad es una institución con crecimiento real. Así lo demuestra el millonario plan de obras que se lleva adelante en todas las facultades, las tareas de extensión que la distinguen entre todas las universidades del país, y los indicadores que nos ubican entre las cuatro principales casas de altos estudios en materia académica y científica”, expresó.
El discurso central estuvo a cargo de la decana de la Facultad de Bioquímica, Química y Farmacia, Alicia Bardón. “Entre las ideas y principios fundacionales de Juan B. Terán están la atención de las necesidades prácticas de la sociedad, el estudio científico de nuestro medio geográfico, social y económico. La investigación deberá colaborar con sus conocimientos a los sectores productivos y con su accionar deberá provocar cambios profundos en la comunidad”, reflexionó.
A continuación Bardón se refirió al compromiso desde la creación de la Casa de Altos Estudios. “Consiste en asumir desafíos y acudir con urgencia a las necesidades sociales. Desde nuestros orígenes se concibió la universidad como una institución con la responsabilidad de concentrar el saber y de diseñar los mejores mecanismos para transmitirlo”, concluyó.
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