21/05/2008 - En General

Un consorcio europeo-brasilero ganó un contrato para gestionar una presa en la Amazonía

Un consorcio formado por el grupo franco-belga Suez y varias empresas brasileras logró un contrato para construir y explotar una gigantesca presa en la Amazonía occidental de Brasil, un proyecto que costará unos 5.300 millones de dólares estadounidenses, anunció el gobierno.

La presa hidroeléctrica de Jirau, en el estado de Rondonia, fronterizo con Bolivia, será erigida y controlada por el consorcio "Energía Sustentable de Brasil", ganador de la subasta pública realizada en Brasilia.

El grupo está formado por Suez (50,1%) y la constructora privada brasilera Camargo Correa (9,9%) y las estatales brasileras Eletrosul Centrales Eléctricas y Compañía Hidroeléctrica de San Francisco, con un 20% cada una.

El consorcio se adjudicó la licitación tras ofertar que cobrará una tarifa máxima de 71,40 reales por megawatio/hora (Mwh) de energía producida (u$s 43,5) y entregada a las empresas distribuidoras.

La tarifa quedó un 21,6% por debajo de los 91 reales (u$s 55,5) establecido como techo por la Agencia Nacional de Energía Eléctrica (Aneel), organizadora de la subasta.
Jiraú y la vecina central de Santo Antonio forman parte del Complejo Hidroeléctrico del Río Madeira, el principal proyecto eléctrico del gobierno de Luiz Inácio Lula da Silva.

El resultado de la subasta fue una sorpresa, pues el favorito era el "Consorcio Jiraú", formado por la constructora privada Odebrecht y la estatal Furnas, una filial del gigante Eletrobras.

Ese consorcio se adjudicó en diciembre pasado la presa de Santo Antonio -otro proyecto que ronda los u$s 5.000 millones- tras ofrecer cobrar 78,87 reales (u$s 48) por megavatio/hora, un 35% del valor máximo fijado por Aneel.

El consorcio que se adjudicó la segunda presa argumentó en un comunicado que logró bajar la tarifa después de que nuevos estudios técnicos permitieran reducir en mil millones de reales (u$s 610 millones) el presupuesto inicial de la obra.

También dijo que podrá terminar la construcción en 2012, un año antes de lo previsto.

La presa deberá alcanzar su plena capacidad de generación en el 2016, con 3.300 Mw, la cuarta parte de la capacidad instalada de Itaipú Binacional, una de las mayores presas del mundo.