En un documento titulado "la memoria no se pierde, el compromiso no se abandona, no colaboramos", el Peronismo Auténtico, recordó a los tres militantes montoneros, asesinados durante la última dictadura militar.
Hace 25 años, estos tres miembros de la conducción nacional de la Organización Peronista Montoneros, caían abatidos por las balas cobardes de la dictadura oligárquico-militar, señalan en el documento.
Hoy 30 de Abril, se cumple un nuevo aniversario del asesinato del compañero Raúl Clemente Yager, el "Roque", acaecido el 30 de abril de 1983, en tanto, el próximo 14 de Mayo se recuerda el asesinato de los compañeros Osvaldo Cambiaso y Eduardo Daniel Pereyra Rossi, hecho producido el 14 de mayo de 1983.
Hace 25 años, estos tres miembros de la conducción nacional de la Organización Peronista Montoneros, caían abatidos por las balas cobardes de la dictadura oligárquico-militar.
Eduardo Daniel Pereyra Rossi, el "Carlón", tenía al momento de su muerte 33 años, y era miembro de la Conducción Nacional.
Peleó contra
toda dictadura en la primera fila, cuerpeando al riesgo con la entereza de los
verdaderos jefes cuando el Proceso se retiraba golpeando.
Dolorosamente, no
pudo ver una democracia en ciernes a pesar de haberlo dado todo por construirla.
Estaba trabajando duramente, junto a nuevos jóvenes que lo acompañaban, en la
reconstrucción de un proyecto Nacional y Popular de Liberación.
Osvaldo Cambiaso, el "Viejo", nació en 1941 en la localidad santafecina de Soldini, de padres agricultores. Ingeniero Químico, profesor e investigador de la Universidad Nacional del Litoral, es detenido en 1976 y liberado en 1981, -siendo el indiscutido jefe de los detenidos peronistas montoneros-, dado su precario estado de salud, merced a la presión internacional ejercida por diferentes organizaciones de derechos humanos y con el respaldo de los gobiernos de España, Francia, Suecia y Holanda, entre otros. Miembro destacado de la Organización, estaba abocado a la lucha por la recuperación de la democracia en nuestro país. Luego de una intensa campaña nacional e internacional, y de un irrefrenable clamor popular, y reclamos de los partidos políticos, organizaciones sindicales, de derechos humanos y la Iglesia, los cadáveres de ambos, fueron encontrados 4 días después en un camino de tierra de la localidad de Lima, Provincia de Buenos Aires, salvaje y cobardemente torturados. Por éste hecho, se responsabilizó a una banda parapolicial encabezada por Luis Patti.
El Compañero Raúl Clemente Yager, "el Roque" nació en la provincia de Santa Fe. Roque era hijo de campesinos y fue lo que se dice un verdadero jefe.
Ingeniero, militó incansablemente siendo fundador de uno de los grupos de base que dieron origen a la Organización Montoneros, el Ateneo de Rosario.
Miembro también de la Conducción Nacional, combatió valientemente en la resistencia a la dictadura oligárquico militar siendo uno de los compañeros mas queridos, admirados y respetados, precisamente por esa valentía que lo destacaba, sumado a una capacidad de análisis brillante y a una simpleza humana que lo caracterizaba.
La muerte lo encontró clandestino pero en su Patria, viajando por la Provincia de Córdoba de pueblo en pueblo, retomando lazos, organizando la resistencia, reagrupando a la militancia revolucionaria en la corriente Intransigencia y Movilización Peronista, llevando esperanza a los compañeros. En fin; continuando la lucha y poniéndose al frente. Allí, testigos ocasionales de la emboscada, lo vieron bajarse del auto, acribillado, al grito "no me rindo carajo, Viva la Patria, Viva Perón, Vivan los Montoneros!!!" para finalmente caer como un Patriota Revolucionario.
Nuestra intención al recordar a estos compañeros va mucho mas allá de un simple ejercicio de recordación lacrimógena, de un simple anclaje en una referencia histórica. Este ejercicio de la memoria, nos refuerza en este presente político en la convicción con que sostenemos e impulsamos nuestra propuesta política, en el esfuerzo de nuestra militancia; convocando –como decía el Carlón- a los que todos los días se levantan y salen a yugarla por migajas que no alcanzan, para que nos rebelemos y construyamos de una buena y definitiva vez otro País, otra República, una Patria digna de ser vivida.
En medio de la infamia de esta catástrofe provocada, con más de 15 millones de compatriotas privados de básicos derechos a la alimentación, a la salud, a la educación, a la vivienda; optamos por continuar enarbolando como bandera y como práctica la misma voluntad de transformación revolucionaria y los mismos propósitos de Liberación Nacional y Justicia Social.
No nos interesan otros proyectos, otras latitudes políticas; no nos concebimos domesticados ni dócilmente rendidos aplaudiendo el tren bala, ni compartiendo el mismo espacio político con Paolo Rocca de Techint o Roberto Urquía de Aceitera General Deheza o Grobocopatel, o con los tránsfugas de la burocracia sindical cómplice de los genocidas y de los explotadores capitalistas.
No nos referenciamos en una historia al simple efecto declamativo, porque no es una historia cualquiera, es nuestra historia, de la cual estamos orgullosos y desde la cual nos ubicamos en este presente y nos proyectamos hacia el futuro, haciéndonos cargo de todo, sin ninguna clase de beneficio de inventario.
Hoy en este presente que vivimos, recordar a compañeros como el "Roque" Yager, "el Viejo" Cambiaso y el "Carlón" Pereira Rossi, significa redoblar nuestro compromiso con el Pueblo y la Nación; en la conciencia que el objetivo no ha sido cumplido, que el camino que resta recorrer es largo y plagado de obstáculos.
Recordarlos en estos tiempos, también entre otras cosas implica que humildemente los intentemos reemplazar, pero para continuar el derrotero del mismo proyecto de Liberación Nacional y no para cualquier cachivache modernista; no vaya a ser que a alguien se le ocurra ponerle el nombre de alguno de ellos a alguna estación del tren bala o a alguna calle de Puerto Madero.
Recordar a estos compañeros desde una ética de responsabilidad revolucionaria de cara al conjunto Pueblo argentino, para nosotros es un compromiso de vida, impermeable a las distintas coyunturas en que hoy se debate este sistema político caduco, perverso y decadente, que mucho más temprano que tarde será reemplazado por la auténtica y genuina voluntad popular en su tránsito hacia una Asamblea Popular Constituyente Originaria. Porque este país como está no nos sirve, no nos sirven sus instituciones, no nos sirve esta República vieja, oligárquica y carcomida por la infamia, los privilegios mal repartidos y la injusticia.
Por estas razones, entre muchas otras, nos apropiamos de esa bella conjunción de palabras que construyera el "Carlon" y desde aquí, desde este presente, desde nuestra militancia cotidiana, desde cada barrio, desde cada comedor, desde cada escuela, desde cada taller, desde nuestros territorios, seguimos convocando.
Movimiento Peronista Auténtico
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