Son los que quieren seguir prendidos de la “proveeduría” estatal., del dólar ilegal, de la información que desinforma o necesitan algunos privilegios. Eso y más acoge a bastantes de aquellos que todavía no aprendieron que la “Patria es el Otro”. Pasa el tiempo y siguen ahí sin demostrar porque fueron elegidos o porqué se tiran un lance a hora para entrar en el círculo.
Solo acompañan el acomodamiento preciso para continuar en lugares de privilegio de la política local...
Son esas personas que prometen casi hasta mentir en algunas ocasiones. “Total después ni se acuerdan de mis proyectos electoralistas”, aseguran. Aparecen en afiches, medios periodísticos y en todos los festejos tradicionales de barrios y localidades del Jardín de la República. Sus séquitos les sacan fotos cuando besan a niños, abrazan a ancianos y acarician a discapacitados. Todo desde esa emoción fingida con la que viven sus días de candidatos. Muestran caras de preocupados cuando algún vecino les plantea el problema con el agua potable o ese líquido maloliente que corre prepotente por las calles del vecindario. Son los mismos que le dicen al alcahuete de confianza. “Anota lo que dice la señora y no te olvides de dármelo cuando estemos en la sede. Vamos a solucionarle el tema bien asumamos”.
También aparecen aquellos que por ser dirigentes de algún club de barrio. Y, acostumbrados a manguear al puntero de turno, creen que son candidatos potables. O están los otros que hablan de “contactos influyentes” y anuncian a diestra y siniestra que si llegan harán más felices a sus electores.
Peor son las personas que manejan grandes negocios y dineros sabiendo, por experiencia, que “Billetera mata ideología” . Tantean y orejean en cualquier partido político para meterse en alguna lista a cambio de billetes constantes y sonantes.
En fin nosotros debemos seguir intentando que los mencionados en estas líneas sean lo menos. No importa que esos manejen casi todo para repartirlos entre pocos, mientras el sobrante “es para la perrada”.
Hay que seguir buscando las maneras para que cada vez sean menos los se aprovechan de cada situación social y económica.. Esos unos seudos políticos son los comienza a pulular en los medios y muchos tienen discursos que más parecen la antipolítica.
Esos personajes, desde el lugar donde se mueven , son los que “entregan” la bandera que enarbolan luego los mediocres , fogoneados por la impericia que alimenta la soberbia de la ignorancia que nos le permite buscar una información justa y verdadera para dejar de lado tantas mentiras. Son los que piden un voto en contra a cambio de dárselos a ellos. Es lo único sincero que poseen.
La política existe, convive a diario con todos y además es necesaria . El problema es que aquellos que añoran el “orden” todavía piensan que la inclusión , la ampliación de derechos y el reparto equitativo es populista. Pobres obsecuentes del liberalismo que destruye condenando a las mayorías a la pobreza y a la limitación de sus derechos.
Los afiches en la vía pública con sus caras sonrientes, con su nombres en cordones y columnas de alumbrado, me sonrién e invitan a seguirlos. No les creo a muchos . pero que grandes actores y actrices se perdieron los teatros tucumanos.
Daniel A.
Villalba
villalbadaniel07@gmail.com
Todos los derechos reservados Copyright 2007
Terminos y usos del sitio
Directorio Web de Argentina
Secciones
Portada del diario | Ediciones Anteriores | Deportes | Economia | Opinion|Policiales
Contactos
Publicidad en el diario | Redacción | Cartas al director| Staff