El INTI-Mar del Plata realizó un estudio sobre el impacto económico de la implementación de sistemas de aseguramiento de la calidad en la industria pesquera de América Latina y el Caribe que demuestra que no se incrementan significativamente los costos, y se logran ganancias de calidad y competitividad.
El sistema de Análisis de Peligros y Puntos Críticos de Control (HACCP) es aprobado por la autoridad competente de cada país y es un requisito para la exportación.
En cualquier país del mundo su implementación requiere de inversiones y una empresa antes de invertir en cualquier sistema o tecnología, quiere saber en cuanto tiempo puede recuperar la inversión. Un estudio sobre la industria pesquera realizado por el INTI demuestra que esto no genera mayores costos.
Asegurar la inocuidad de los alimentos es imprescindible para garantizar la salud de la población y este objetivo se cumple cuando las empresas implementan un sistema de aseguramiento de calidad.
El INTI-Mar del Plata realizó un estudio sobre el impacto económico de la implementación de sistemas de aseguramiento de la calidad en la industria pesquera de América Latina y el Caribe a través del cual se analizaron tres casos con la evaluación de la factibilidad económica de la implementación de sistemas basados en HACCP mediante el análisis del costo de la calidad en plantas procesadoras de productos pesqueros de la región latinoamericana, que cumplían con los pre-requisitos de Buenas Prácticas de Manufactura y Procedimientos Operacionales Estándares de Saneamiento.
Los casos estudiados fueron:
Colas cocidas congeladas de langosta (Panulirus Aarhus) elaboradas en Cuba
Carne cocida congelada de centolla (Paralomis longipes) elaborada en Ecuador.
Filetes interfoliados congelados de merluza (Merluccius hubbsi) elaborados en Argentina.
Se compararon los costos de calidad antes y después de la implementación del sistema HACCP pudiendo evidenciar que, luego de la implantación y aprobación de sistemas basados en HACCP ya sea para la elaboración de productos de altos precios de venta como para otros de menor precio, se recuperan las inversiones y se logran reducciones en los costos de calidad y por ende, en los costos de producción.
Asimismo, como beneficio adicional, la implementación del HACCP se refleja en el mejoramiento de la calidad. La razón es que el sistema HACCP requiere un profundo conocimiento técnico de los procesos y productos; y que una vez que se adquiere, es de utilidad para identificar y controlar con mayor facilidad los costos de las no conformidades.
El sistema HACCP aprobado garantiza la inocuidad del producto elaborado y paralelamente, le permite a la empresa lograr mejores precios de ventas, incrementar su participación en el mercado y/o mejorar el rendimiento económico global de la planta.
Esta metodología se puede aplicar a otras industrias de alimentos para evaluar sus beneficios y las ventajas de proveer inocuidad y calidad a sus productos.
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