El director de Recursos Hídricos de la provincia, Desiderio Dode, indicó que las lluvias de este fin de semana sirvieron para romper con el ciclo de sequía que venía azotando la provincia desde hacía bastante tiempo.
Dode remarcó que la cantidad de agua caída no fue importante, ya que se registró poco milimetraje de acuerdo al promedio esperado para el mes, pero cambió el ánimo de la gente.
"En donde más llovió fue en el sur, con 20 a 30 milímetros caídos y luego en el este con 15 milímetros. En la zona norte, en el departamento Trancas, cayeron 5 milímetros, pero fueron muy intensos", dijo el funcionario.
Aclaró que el promedio de lluvias para octubre debería ser de unos 100 milímetros, por lo que la incidencia de estas precipitaciones es muy baja a nula en algunos sectores del campo. "Pero era algo que se la necesitaba", subrayó.
De todas maneras, el funcionario anticipó que seguirán monitoreando la evolución del clima en los próximos días y aclaró que debido a las sequías que ya se preveían la Provincia puso en marcha un plan de contingencia que podría verse mejorado si las precipitaciones ayudan de aquí para el resto de la temporada.
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