Expresó ayer en su testimonio Isabel Navarro sobre el secuestro de su padre Salvador quien estuvo detenido – desaparecido un mes y medio. Se proyectó un documental. Prestó declaración un militar retirado pero luego el TOF declaró su nulidad.
Ayer se realizó una nueva audiencia por el megajuicio en Tucumán donde hay 41 imputados.
El primer testigo en declarar fue Fausto Marcelo González. Militar retirado. Testigo propuesto por la defensa oficial. Habló sobre el momento en que debía levantarse la 'zona de operaciones' en Santa Lucía (1978).
"Había que dejar una pequeña fracción, a pedido de la población para darles seguridad", dijo González. Sin embargo en estos más de 10 meses de audiencias, varios testigos, pobladores de Santa Lucía y Caspichango, hablaron del terror, en la zona, infundido por la presencia militar.
Al final del testimonio el TOF resolvió la nulidad de la declaración de Fausto González.
También prestó declaración Isabel Regina Navarro, hija de Salvador Leocadio Navarro. “Cuando liberaron a mi padre estaba desnutrido y no podía caminar”, expresó conmocionada.
El 13 de julio de 1976, a las 17, Salvador se encontraba trabajando con su esposa en una finca, entre la Curva de Los Vega y Los Pocitos, Departamento Tafí Viejo. En ese momento llegaron al lugar cuatro o cinco automóviles y un camión de los que descendieron alrededor de seis hombres vestidos de civil, a cara descubierta y fuertemente armados. Del camión hicieron bajar a una mujer de nombre Liliana, quien señaló a Navarro diciendo "ese es". Entonces lo golpearon y secuestraron.
Fue trasladado a la Brigada de Investigaciones de la Policía de la provincia, donde fue torturado. Luego de permanecer detenido un mes y cuatro días, le informaron que sería puesto en libertad, y le advirtieron que nunca más debía meterse en política. Navarro ya falleció.
Su hija precisó ayer que como secuelas del secuestro tenía reumatismo.
Durante la audiencia también se incorporaron por lectura otros testimonios como la declaración de Ricardo Coronel, Romelio Maziel, por la causa Centurión, Ramona Espejo, por la causa de Margarita Díaz.
Además se leyó la declaración de Juan Ignacio Cativa. Contó las torturas a las que fue sometido e identificó a Albornoz. “No podía más. Quería suicidarme. Buscaba un tomacorriente para meter los dedos", dijo.
También leyeron declaraciones de Miguel Antonio Lapetina, de Carlos Moisés Núñez. Por la causa de María del Pilar Carmen Toledo, se leyó la declaración de su madre Josefa.
Se proyectó el documental “El escuadrón de la muerta”.
La audiencia se reanuda hoy a las 10.
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