Enviar Nota | Imprimir

AMPLIARCorte Suprema de Chile, herencia de Pinochet

Corte Suprema chilena admite "omisiones" durante golpe

El pleno de la Corte Suprema reconoció este viernes que cometieron "graves acciones y omisiones" durante las violaciones a los derechos humanos cometidas bajo la dictadura militar, pero no pidió perdón como lo hicieron el miércoles los jueces de la Corte de Apelaciones.

Tras cuatro horas de reflexión, el pleno de ministros señaló que "el quiebre de la institucionalidad democrática a partir de septiembre de 1973 permitió un régimen cívico militar, que violentó las garantías de los ciudadanos de nuestro país, que terminó con la muerte de mucho de ellos, desaparecidos, con detenciones irregulares y otros atropellos".

Tras analizar los hechos y el rol del Poder judicial, la Suprema llegó a la conclusión de que "no cabe otra actitud que no sea explicitar el reconocimiento de las graves acciones y omisiones que en ese entonces se incurrió, arrastrando con ello a parte de la judicatura del país, que claramente, a la hora presente y con la mesura y altura de miras de hoy, corresponde decir que constituyó una dejación de funciones jurisdiccionales".

"Por lo que es tiempo ;prosiguió- de dejarlo en claro a todos los miembros actuales y futuros de la institución y a las generaciones ciudadanas que vengan, para que ese comportamiento no se repita, por contradecir un Estado de Derecho propio de una República democrática".

Concluye la declaración leída por el presidente del máximo tribunal, Rubén Ballesteros, que "consecuente con lo anterior, esta Corte Suprema ha comprometido sus mejores esfuerzos en el esclarecimiento de esta clase de delitos;. E "insta a todos los jueces de la República y funcionarios del Poder Judicial a persistir en tal tarea, como también al reconocimiento y promoción de los Derechos Humanos, tal cual lo prescribe la Constitución Política de la República".

Consultado Ballesteros de por qué en la declaración no se incluyó la palabra perdón, respondió: "ésa es una respuesta que yo tendría que dar en otros instantes, no en este momento". Ballesteros integró al menos cinco consejos de guerra tras el Golpe Militar donde fueron enjuiciados militantes socialistas. Tras el regreso a la democracia, votó en contra del enjuiciamiento del ex dictador Augusto Pinochet. Asimismo siempre resolvió en favor de la prescripción o la amnistía en las causas sobre violaciones a los derechos humanos.