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AMPLIARTucumán se quedó sin bancos en vísperas del fin de semana largo

Tucumán se quedó sin bancos en vísperas del fin de semana largo

La indignación primó en parte de la sociedad, debido a que el viernes el gremio La Bancaria realizó un paro total. Exigen la reincorporación de 33 empleados a quienes la Caja Popular no les renovó el contrato. Precisamente esta institución trabajó con normalidad.

Por Sebastián Ganzburg

La irresponsabilidad caracteriza a los dirigentes gremiales de La Bancaria. El viernes sin importarles que el lunes es feriado realizaron un paro y Tucumán se quedó sin bancos en toda la jornada afectando a miles de tucumanos que no pudieron realizar ninguna transacción. El paro fue de las tres últimas horas de atención en el resto del país.

Lo llamativo es que la Caja Popular trabajó el viernes con normalidad, solo se observó menos de un 20 por ciento de acatamiento en esa institución. Otro dato es que días atrás hubo elecciones en La Bancaria y los empleados de la Caja no votaron, en repudio al traslado de urnas a la sede gremial, cosa que no ocurrió en ninguna otra entidad bancaria del país.

“Yo tengo 42 años de trabajo en la Caja, la conozco en todos su ambientes. Viví todos sus momentos históricos y momento como este no lo viví nunca. El acoso a la gente para que no trabaje es inaudito. Evidentemente los privilegios que tenía la gente de La Bancaria deben ser muy importantes porque lo quieren mantener. Además la Caja no despidió a nadie, simplemente no se renovó contrato porque la institución considera que no se necesita más esos servicios. Todo es dentro de la ley, porque son contratos a término, entonces el empleado sabe que en algún momento se termina”, explicó el gerente general de la Caja Popular de Ahorros Luis Gómez Salas, hace dos semanas, a este diario.

La Bancaria está manejada a nivel local por Eduardo Bourlé y el tucumano Carlos Cisneros quien además tiene mucho peso en las decisiones a nivel nacional. Precisamente Cisneros entre el 2002 y 2003 fue presidente de la Caja, según se aprecia en los balances de la entidad bancaria, fue una gestión caracterizada por cuantiosas pérdidas económicas. Del 2004 a la actualidad La Caja tiene superávit.