Representantes de la producción agroindustrial patagónica participaron del encuentro de trabajo organizado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) y la Federación Empresaria del Chubut (FECH), en la sede de la Cámara de Industria y Comercio del Este del Chubut.
En la reunión, que congregó a representantes del sector pesquero, forestal y ganadero de las provincias de Chubut y Río Negro, estuvieron presentes Rubén Villagra, presidente de la Federación Empresarial del Chubut; Luis María Aguirre, titular de la Cámara de Comercio, Industria, Producción y Turismo del Oeste de Chubut; Roberto Saffirio, vicepresidente Regional de la CAME y Carlos Levin, presidente de la Cámara de Agricultura, Industria y Comercio de General Roca; entre otros.
Durante el encuentro, los productores detallaron los inconvenientes que enfrentan a diario, como ser la falta de rentabilidad, dado que el 57 % de las explotaciones agropecuarias del país atraviesan una crisis de rentabilidad y precisan en forma urgente compensaciones para afrontar los altos costos internos.
En el caso específico de la pesca, una de las actividades más pujantes de la Patagonia, la situación es aún más grave ya que las ventas al mercado europeo, principal destino de exportación, han disminuido debido a la crisis que atraviesa el viejo continente. Juan José Elizalde, titular de la Cooperativa Pescadores del Mar Ltda., no sólo describió los problemas que enfrentan los pescadores artesanales a la hora de intentar comercializar sus productos, sino también manifestó que la actividad “se encuentra en una compleja situación, sufriendo además los embates de la pesca industrial”. Respecto a la entidad que preside, aseguró que “nuclea a 98 embarcaciones que dan sustento a aproximadamente 588 familias”.
Otro sector productivo que hizo escuchar su voz fue el ovino. “Antes había 3.700 productores, de los cuales el 80 % eran pequeños y medianos. Ahora no llegamos ni a 2.000”, afirmó Juan Javier Trucco, presidente de la Sociedad Rural Valle del Chubut. Además, precisó que “los costos de producción solían cubrirse con 2.000 ovinos, mientras que en la actualidad precisamos 3.000”.
Por otra parte, Nelson Walker, representante de la Federación de Sociedades Rurales de Chubut, describió la situación actual de la industria lanera. Falta de insumos, elevados costos internos y caída de los precios internacionales fueron algunos de los tópicos abordados. Asimismo, “entre 700 y 800 trabajadores permanentes y otros 700 temporarios perdieron sus puestos de trabajo”, estimó.
Frente a la necesidad de intentar encaminar este complejo escenario, el presidente de Economías Regionales de la CAME, Raúl Robín, aseguró que “la devolución de las retenciones podría ayudar a afrontar el adicional salarial que se paga en la región”, la cual está categorizada como zona desfavorable.
En dicho marco, los productores no sólo remarcaron la importancia que tendría el hecho de poder participar en la determinación del Salario Mínimo, Vital y Móvil, sino que también analizaron diversas propuestas de incremento de la remuneración mínima del trabajador rural, teniendo en cuenta que ya no se podrá acordar/homologar el pago de sumas de carácter no remunerativo, dada la inconstitucionalidad de dicha modalidad. El nuevo esquema de regionalización de las Comisiones Asesoras Regionales (CAR), ámbito en el que se discuten paritarias rurales, también fue objeto de análisis.
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