Jóvenes y adolescentes son un sector de riesgo para padecer trastornos de la voz, informó ayer el Colegio de Fonoaudiólogos de La Plata mediante un relevamiento que muestra que el 45% de las consultas son de menores de 25 años.
El informe suministrado a la prensa con motivo del "Día Mundial de la Voz", que se celebra mañana, incluye más de 1.200 consultas realizadas en lo que va del año en centros de atención pública y privada de la capital bonaerense.
"Hace cinco años, apenas el 20% de los pacientes con dificultades en la voz eran jóvenes o adolescentes", en quienes las patologías más frecuentes sonlos esbozos nodulares, nódulos, pólipos, edemas y la hiperfunción laríngea, explicaron.
Para Claudia Díaz, de la comisión de la Voz de la entidad, dijo que las salidas nocturnas exponen a los jóvenes a "un combo de factores de riesgos como la sobrecarga vocal", en ámbitos con "sonidos de alta intensidad" que los obliga a hablar en voz alta "sin la educación y entrenamiento técnico adecuados".
También inciden "tabaquismo, la temperatura del lugar y los cambios bruscos de ambiente", detalló.
Otros factores, enumeró, son "emocionales, químicos y biológicos que interfieren en
muchos casos, como los conflictos familiares,
stress, alergias, falta de hidratación, reflujo gastroesofágico y la mala
postura corporal".
Los adolescentes se acostumbran a los cambios en
su voz "y los van
naturalizando, registrando la dificultad cuando ingresan a la vida laboral, profesional o
universitaria y su voz ya no les resulta
eficiente" para responder a esa demanda, alertó Díaz y señaló que conocer los factores
de riesgo permite "prevenir individual
y socialmente a la comunidad".
Los especialistas destacan la importancia de que los adultos adviertan cualquier modificación en la calidad de voz de los jóvenes y realicen una consulta temprana con fonoaudiólogos.
El tiempo de rehabilitación dependerá "del momento en que se hace la consulta, el tipo de cuadro, la disposición y trabajo del paciente y la posibilidad de modificar las conductas nocivas" que causaron la afección, explicó la especialista.
Los síntomas más frecuentes para tener en cuenta son: fatiga vocal, ronquera, falta de proyección e intensidad vocal, agravamiento del tono de voz, ardor o picazón de garganta. La prevención en estos casos es importante, en las escuelas, en la comunidad, a través de campañas de fuerte impacto social.
La entidad realizará mañana una campaña en lugares públicos de La Plata destinada a docentes, artistas, locutores, cantantes, animadores y todos quienes usan como herramienta de trabajo el sistema fonador bajo la consigna "Si vivís de la voz, no corras riesgos, entrenala con un fonoaudiólogo".
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