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AMPLIARAmplio ensayo de seguridad en Rio

Operativos de seguridad en Rio por la visita del Papa

Escuadrones de la muerte parapoliciales dominan Guaratiba, el barrio de Rio de Janeiro donde el 28 de julio próximo el papa Francisco oficiará la misa principal de la Jornada Mundial de la Juventud de la Iglesia Católica ante más de 2 millones de peregrinos, informó este la prensa brasileña.

Por ello, el Ejército y la Marina brasileña desplegarán por lo menos 2.600 militares en el barrio ubicado en el extremo oeste de Rio de Janeiro, donde la mayor referencia es la playa de Barra de Tijuca.

"Las milicias son discretas y por eso es importante tener toda la atención", afirmó el comisario de la Policía Federal Víctor César Santos, coordinador de la secretaría de Grandes Eventos del gobierno brasileño.

Según Folha de Sao Paulo, en Guaratiba el control lo posee la llamada Milicia de Toni, integrada por policías retirados y en actividad amparados por parte del poder público, que surgieron como 'protectores' de las comunidades contra los narcotraficantes.

El jefe es Toni Souza, ex policía militar de 38 años que tiene 11 pedidos de captura por homicidios y asociación ilícita, y comanda al grupo que hasta hace poco fue llamado Liga de la Justicia.

En Guaratiba la milicia, también conocida como escuadrón de la muerte, cobra 17 dólares mensuales a cada habitante de las favelas y barrios pobres a cambio de seguridad, y 50 dólares para la instalación de TV por cable clandestino, además de usufructuar el transporte ilegal de pasajeros en las terminales de tren y de autobuses, de acuerdo a la prensa local.

También se les endilga a los parapoliciales el control de los horarios de los comercios y de la vida nocturna en las comunidades.

Para la visita del Papa argentino, el Ejército brasileño tendrá además de los 2.600 hombres que ocuparán Guaratiba, tal como se hizo en 2010 con las favelas del Complejo de Alemao para permitir el ingreso policial, otros 3.400 agentes de guardia.

Habrá 600 infantes de marina para proteger al Papa y a los peregrinos en dos haciendas. La Policía Federal será la encargada de la seguridad personal del papa Jorge Bergoglio, que será trasladado durante su viaje, del 23 al 28 a Rio, por un helicóptero de la Fuerza Aérea.

Para llegar a los campamentos para ver al Papa y participar de la JMJ habrá un límite de 3 kilómetros para el paso de vehículos, de acuerdo a parte del plan de seguridad que está siendo conocido.

El sábado participaron 70 policías de la tropa de elite Bope en un simulacro de crisis de seguridad en el cerro Corcovado, donde se ubica en su cima el monumento Cristo Redentor, lugar que la Diócesis de Rio de Janeiro prepara para llevar al papa Francisco. El Papa, según informaciones de la curia brasileña, también deberá visitar el principal santuario católico de Brasil, Aparecida, en Sao Paulo, y a la presidenta Dilma Rousseff en Brasilia.