27/03/2013 - Jujuy

Milagro Sala recordó la marcha que marcó "el principio del fin de la impunidad"

La referente de la organización Tupac Amaru de Jujuy, Milagro Sala, recordó ayer que la movilización popular provocó hace un año en esa provincia la renuncia del juez federal Carlos Olivera Pastor y marcó "el principio del fin de la impunidad".

"Fueron las organizaciones populares las que provocaron la renuncia de Olivera Pastor", dijo Sala a Télam, al recordar la marcha del 8 de marzo y sobre todo la del 24 de marzo de 2012, que reunió a unas cien mil personas en San Salvador de Jujuy.  

Sólo tras la renuncia de Olivera Pastor, acusado de frenar o "cajonear" la investigación de los crímenes del terrorismo de estado en esa jurisdicción, comenzó el primer juicio en Jujuy por delitos de lesa humanidad cometidos durante la última dictadura.

 "Aquellas movilizaciones demostraron que fue adecuada la decisión y el compromiso de las organizaciones sociales de Jujuy de apoyar la lucha histórica que encabezaron los organismos de derechos humanos por la memoria, la verdad y la justicia", dijo Sala. 

La referente de la Tupac sostuvo también que "casos como el de este y otros jueces en la provincia, con claras y hasta públicas vinculaciones con sectores del poder político, confirma además la necesidad de impulsar la democratización de la justicia".

   En este sentido, opinó que "las provincias del norte han sido gobernadas como feudos y la justicia ha sido funcional a quienes designaron a los responsables de administrarla".

  "En otras palabras, los jueces no cayeron del cielo sino que los han puesto los políticos, incluso muchos de los que se rasgan las vestiduras y piden la `independencia` del Poder Judicial, pero que son los que después acusan a los magistrados cuando no obtienen los fallos que pretenden", argumentó Sala. 

 El 8 de marzo de 2012, cuando todavía era juez Olivera Pastor, la Tupac Amaru y la Red de Organizaciones Sociales marcharon junto a los organismos de derechos humanos para reclamar al magistrado la agilización de las causas por delitos de lesa humanidad en Jujuy. 

El 24 de marzo del mismo año, una nueva marcha masiva, con una columna de varios kilómetros, insistió en la demanda en una de las dos provincias, junto a Catamarca, en las que hasta entonces no se habían iniciado juicios contra los represores de la dictadura. 

 Tras la renuncia de Olivera Pastor, concretada días después, el nuevo juez federal Fernando Poviña impulsó la investigación en causas como la de la Noche del Apagón, la represión masiva de 1976 a trabajadores y vecinos del ingenio Ledesma. 

 Poviña ordenó un allanamiento en el que fueron hallados informes de inteligencia que indicaban complicidad patronal con los represores y citó a indagatoria al presidente de Ledesma, Carlos Pedro Blaquier y a Alberto Lemos, su ex administrador general. 

 La investigación de la Noche del Apagón y otras cuatro causas fueron elevadas a juicio, en el que se espera sentencia para la segunda quincena de abril o para mayo próximos.