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AMPLIARFelicidad en un día de sol otoñal

Felicidad en un día de sol otoñal

Por primera vez se festejó ayer el Día de la Felicidad que coincidió con la llegada del otoño. Esta estación de hojas secas y temperaturas agradables. El sol iluminó la ciudad, como hacía días no pasaba y trajo consigo una jornada espléndida.

Por Sebastián Ganzburg 

Marzo no es el mejor de los meses, se acumulan muchos gastos, escuela, retomar el año, por lo tanto atravesarlo cuesta bastante, sobre todo en los últimos días. A pesar de esto, la ONU decidió que los 20 de este mes se conmemore el Día de la Felicidad, que se lo festejó, ayer por primera vez. 

En Tucumán vino acompañado de un cálido sol que lejos estuvo de ser agobiante. Con él también llegó la estación más seca, el otoño, donde todo se pinta de un hermoso amarillo. 

Ayer fui feliz, las vicisitudes cotidianas no impidieron que disfrute de semejante jornada. Porque lo importante es eso, ser feliz, más allá de los problemas que todo mortal atraviesa. Sostengo que uno debe ser lo más simple posible, aunque serlo no sea sencillo. “Pensar en nada”, dice León Gieco. “Voy a desconectarme por un rato y dejar que a mi destino lo maneje la suerte”, sostiene Pity Álvarez. Ambas premisas son válidas, la idea es tratar de no pensar demasiado y nadar sin tanto peso, de lo contrario, es probable que uno termine en el fondo del mar.

Un día de sol otoñal bastó para sonreír, para ser feliz en medio de un caso, para respirar esperanzas, para valorar la libertad de elegir, de ser, de amar, de sentir. Existir de la mejor manera posible, con humildad, altura, compromiso y ética.