El gobernador de Tucumán, José Alperovich, afirmó el viernes que "son prometedores los índices de la economía del país y nuestra provincia comienza a recobrar su impulso, tras sufrir los cimbronazos de la crisis internacional", al inaugurar el 108° período ordinario de sesiones, donde brindó un balance de su gestión enumerando las obras realizadas.
Durante su discurso que se extendió durante algo más de una hora, el mandatario tucumano sostuvo que "a pesar de las dificultades económicas y las limitaciones presupuestarias hemos seguido construyendo viviendas, escuelas, hospitales y caminos".
Por décima vez consecutiva, Alperovich rindió cuentas a la Legislatura provincial y al igual que en ocasiones anteriores llegó al recinto caminando, acompañado por sus hijos y saludando a miles de personas que se acercaron para brindarle su apoyo.
El gobernador brindó datos sociales y económicos, elogió las medidas políticas adoptadas por el gobierno nacional, y afirmó que "estamos realizando obras que no se hacían hace más de 40 años con inversión en 2012 de 412 millones de pesos".
El mandatario tucumano se comprometió a "continuar por el camino que ha permitido índices records de empleo y crecimiento en la provincia y en el país".
"Ha quedado atrás el Tucumán de los altos índices de desocupación y mortalidad infantil; de los hospitales que no daban abasto y las escuelas ranchos; con su aparato productivo paralizado y agobiado por sus deudas", apuntó.
Como contrapartida, resaltó que "se
han vuelto ya parte del paisaje cotidiano de la provincia los nuevos
hospitales, escuelas, viviendas y autopistas construidas".
"También se ha hecho habitual que
los sueldos se paguen puntualmente, como corresponde, y que los alumnos
asistan a la escuela sin interrupciones", agregó.
La crisis económica internacional fue puesta de manifiesto por Alperovich,
quien recordó que "Europa vive un proceso recesivo que ha generado,
según los últimos datos, la escalofriante cifra de 26 millones de
desocupados".
"En este nuevo y preocupante escenario mundial era previsible que la economía del país y de la provincia no creciera durante el año al ritmo en que lo venía haciendo hasta 2011", añadió.
Ante esta situación
el gobierno se planteó para 2012 un desafío que consistía en lograr que el
crecimiento de la economía continúe.
"Debíamos actuar con mucha
prudencia con respecto al gasto del Estado, pero sin recortar la obra
pública o los planes sociales", apuntó.
El titular del Ejecutivo provincial
señaló que "ante la crisis económica mundial no debíamos responder
con políticas de ajustes y recortes salariales, como proponían algunos,
sino que, por el contrario, el camino a seguir, en consonancia con el gobierno nacional, era profundizar las políticas proactivas".
"Fueron esas políticas las que nos
han permitido conseguir índices récords de empleo y crecimiento en la
provincia y el país y también hicieron posible que saliéramos airosos del
desplome financiero mundial de 2008-2009", expresó.
"Un año después, vuelvo a rendir
cuentas ante ustedes y puedo afirmar que no estábamos equivocados en el
diagnóstico ni tampoco en el rumbo elegido", manifestó.
Según Alperovich, era previsible en 2012 el crecimiento económico fuera por debajo de los índices de años anteriores, pero resaltó que "a pesar de las dificultades económicas y las limitaciones presupuestarias hemos seguido construyendo viviendas, escuelas, hospitales y caminos".
"Impedimos que
la economía se enfríe, y al mismo tiempo, logramos preservar los
indicadores sociales que tanto trabajo nos ha costado alcanzar en estos
años", agregó.
Para obtener los logros mencionados,
Alperovich afirmó que "fueron decisivas las políticas sociales y
económicas que Néstor Kirchner comenzó a instrumentar en el país partir de
2003 y que nosotros acompañamos con entusiasmo".
"Jugó y sigue jugando un papel muy importante la especial atención que hemos recibido los tucumanos durante todos estos años, sucesivamente, de Néstor y Cristina Kirchner", sostuvo.
Al hacer un repaso estadístico, indicó que en la provincia
la desocupación del último cuatrimestre se ubica 3,9 por ciento, muy lejos
del 21,3 por ciento que existía en 2003.
"Una cifra histórica que significa que en nueve años de gobierno creamos 380.000 empleos en la provincia", indicó.
También dijo que, pese a la crisis, la desocupación aumentó sólo un punto en Tucumán con respecto al año pasado y se mantiene por debajo de la media nacional que está en 6,9 por ciento.
La mortalidad infantil "se mantuvo alrededor del 13 por
mil y lejos ha quedado el catastrófico 25 por mil de fines del 2002", recordó.
La pobreza, que en 2003 llegaba al 64,6
por ciento, descendió en la provincia al 8,3 por ciento, mientras que la
indigencia ha pasado del 32,25 al 1 por ciento.
Según Alperovich, dos cosas hicieron posible nuestra fortaleza frente a las adversidades surgidas en el camino: "el masivo apoyo recibido a través del voto popular a las políticas económicas y sociales que llevamos adelante y la recuperación de un rol protagónico para el Estado".
"Estamos construyendo un nuevo Tucumán, sin escuela ranchos, con modernos hospitales y bajos índices de desocupación en una provincia donde los sueldos se pagan al día y donde la actividad productiva día a día se diversifica", señaló.
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