Ivo Herzog, cuyo padre Vladimir fue asesinado durante la dictadura militar brasileña, dijo ayer a la agencia ANSA, que el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF), José Maria Marín, fue cómplice de ese crimen y debe renunciar al Comité Organizador del Mundial 2014 (COL).
"Este ciudadano, aunque no sé si llamarlo de esa manera, o esta persona llamada José María Marín fue cómplice del asesinato de mi padre en 1975, lo afirmo y mi familia también, y alguien así no puede ser la autoridad del Comité que organiza el Mundial de 2014 en mi país" declaró Ivo Herzog.
Si Joseph Blatter, presidente de la FIFA, presionó en su
momento para que Ricardo Teixeira, expresidente de la CBF,
dejara su cargo en el COL, debería hacer lo mismo ahora con
Marín, afirmó Ivo Herzog.
La familia Herzog afirma que Marín "fue un político de
influencia importante en la dictadura, llegó a ser gobernador de
Sao Paulo, y fue él quien dos semanas antes del asesinato de mi
padre lo amenazó públicamente, en ese tiempo una amenaza era
parecido a una condena a muerte", aseveró.
"En 1975 Marín amenazó públicamente a mi padre y en 1976,
casi un año después de su muerte, Marín hizo otro discurso muy
favorable al represor Sergio Fleury, un comisario que todo el
mundo recuerda como uno de los mayores torturdores y asesinos de
presos políticos", añadió.
El mes pasado la Corte Interamericana de Derechos Humanos
ordenó al estado brasileño que identifique a los culpables y
someta a juzgamiento a los autores del crimen que, según
historiadores, marcó un punto de inflexión del régimen que tomó
el poder tras el golpe de estado de 1964.
Marín asumió la conducción de la CBF y la conducción
colegiada del Comité Organizador Local (COL) de la Copa hace
poco menos de un año tras la renuncia de Ricardo Teixeira,
envuelto en denuncias de corrupción.
"Sería una vergüenza para Brasil, para el país que ha
demostrado madurez política eligiendo a una mujer valiente como
la presidenta Dilma Rousseff, que esa persona llamada Marín siga
siendo jefe del Comité, él debería renunciar a ese cargo",
afirmó Ivo Herzoz.
Poco después de que Rousseff, quien fue presa y torturada
también Sao Paulo, creó la Comisión de la Verdad, el organismo
escogió al asesinato de Vladimir Herzog como una de sus
investigaciones principales.
"Dilma (Rousseff) sabe lo que hizo Marín durante la dictadura, sabe que tiene un pasado sucio, por eso lo evita", dijo Ivo Herzog, que hace unos días lanzó una campaña, que ya recibió 25.000 firmas de apoyo, por la renuncia de Marín, incluída la del popular músico Chico Buarque. En Brasil rige la ley de Amnistía que impide juzgar a los represores que actuaron durante el gobierno de excepción que se prolongó entre 1964 y 1985, pero debido a las evidencias y testimonios recogidos por los familiares de la víctima, en 1996 el Estado brasileño asumió la responsabilidad de la muerte de Vladimir Herzog en 1975.
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