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AMPLIARfoto gentileza LaRiojavirtual.com.ar

No hallaron restos de Marita pero continúa la búsqueda

Dos allanamientos en antiguos prostíbulos se realizaron ayer en La Rioja en busca de restos humanos enterrados, en el marco de la investigación por la desaparición de Marita Verón a manos de una red de trata, con resultado negativo, informaron fuentes judiciales.

El primero se efectuó en un prostíbulo que figuraba como whiskería, que luego se convirtió en el boliche bailable "La Chueca" y ahora estaba abandonado, sobre la colectora de la Ruta Nacional 38, a unos 7 kilómetros al este de la capital provincial.

   El segundo fue en el boliche "Sexto Sentido", que antes era el prostíbulo "El Desafío", sobre la misma colectora aunque un kilómetro al sur, en sentido a la ciudad de Córdoba, donde también se realizaron demoliciones y excavaciones.

   Personal judicial, policial y de bomberos demolió el piso donde estaban los dormitorios y las camas y excavó varios sectores, con resultado negativo en ambos casos, señalaron del operativo. 

   Las tareas continuarán hoy a las 9, con un allanamientos a otro antiguo prostíbulo, en el barrio Joaquín V. González de la capital riojana, cerca de donde vivía Liliana Medina, -una de las acusadas en el juicio por el caso de María de los Angeles Verón-, quien fue propietaria de los tres locales. 

   Los allanamientos fueron pedidos por el juez Javier Tomas, de Tucumán, en un exhorto a su par Daniel Barría, de La Rioja, quien dispuso su concreción. 

   El abogado de la Fundación María de los Angeles Verón, Carlos Garmendia, informó más temprano a Télam que recibieron un mail que denunciaba que bajo las estructuras que sostenían las camas de los prostíbulos podrían encontrarse restos humanos. 

   El dato fue entregado a la fiscal de la justicia tucumana Adriana Reinoso Cuello, a cargo de la causa por el paradero de Marita Verón -desaparecida en 2002- quien gestionó el exhorto girado a la justicia de La Rioja. 

   En el segundo operativo participaron Garmendia y su colega Jorge Cáceres, éste defensor de Medina, quien sostuvo luego que se trató de un trámite inútil, ya que los lugares habían sido allanados de igual manera en 2011, aunque el letrado de la  Fundación sostuvo que no se habían hecho excavaciones ni demoliciones.

   También participaron -en los dos casos- efectivos de la División Trata de Personas de La Rioja y de Tucumán, a cargo de los comisarios Carlos Garrot y Julio Fernández, respectivamente, además de bomberos, Policía Técnica Judicial y el grupo especial CAPE de esa fuerza de seguridad.