Luis Bárcenas llegó a la Fiscalía Anticorrupción, donde respondió todas las preguntas. Él niega que su letra esté en los documentos publicados en "El País".
La gente le gritó “¡ladrón!”, “¡sinvergüenza!” y algunos le pidieron un sobre con dinero.
A todo eso debió enfrentarse el extesorero del Partido Popular (PP),
Luis Bárcenas, quien ayer llegó a la Fiscalía
Anticorrupción en Madrid, para declarar como imputado sobre la presunta
contabilidad paralela en el partido que hoy gobierna España.
Bárcenas es el presunto autor de los papeles publicados por el diario
“El País”, que son la prueba periodística que sostiene la tesis de que
en el PP se pagaban sueldos paralelos a sus dirigentes (incluido el
presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que niega todo) con dineros
provenientes de empresas inmobiliarias, en su mayoría. Esos pagos se
habrían realizado entre 1990 y 2008.
El alcance del escándalo Bárcenas ha amenazado la credibilidad
de Rajoy tanto en casa como en Europa, mientras trata de combatir una
profunda recesión y las dudas persistentes sobre si las finanzas de
España podrán sobrevivir sin un rescate internacional.
El extesorero, vinculado al PP durante tres décadas, declaró en calidad
de imputado durante más de dos horas y se fue sin hacer comentarios a
los numerosos medios de comunicación que lo esperaban para conocer su
parecer sobre una investigación que la Fiscalía Anticorrupción abrió por
oficio.
¿Es su letra?
En un breve comunicado, la Fiscalía informó que Bárcenas había
respondido todas las preguntas que le realizaron los investigadores,
aunque no se detalló más al respecto.
La noche del lunes (04.02.2013), Bárcenas habló con un canal de
televisión, donde negó tajantemente ser el autor de los documentos
manuscritos publicados por “El País”, aunque expertos calígrafos
consultados por otros medios españoles aseguran que en esos papeles se
distingue claramente la letra de Bárcenas. Los manuscritos ahora están
en manos de la fiscalía.
Antes que el cuestionado Bárcenas, declaró el exdiputado del PP Jorge
Trías, quien ha asegurado públicamente que le consta que en su partido
se pagaban sobres con dinero a algunos dirigentes. "He cumplido mi
deber", dijo Trías luego de prestar declaración en calidad de testigo
durante cerca de una hora.
Una vez concluya su investigación, la Fiscalía Anticorrupción debe
decidir si archiva el caso o si, por el contrario, lo judicializa,
pasándoselo al juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz, que ya está
investigando a Bárcenas y a otros funcionarios del PP dentro del Caso
Gürtel, en marcha desde el 2009.
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