El día de descanso las piletas para lavarse manos, dientes y cara en cada campamento han sido cita obligada de todos los integrantes de la caravana Dakar porque allí aprovechan el impasse, también, para lavar su ropa. VIDEO
Pero este año, la organización dispuso en el vivac deTucumán un servicio inédito: el de lavandería. Allí tres personasreciben las prendas del interesado, que deberá pagar 15 pesos por cada remera, 25 por unas bermudas, 30 por un pantalón y 5 por cada ropa interior o par de medias.
La cercanía del vivac a la ciudad de Salta permitió que varios integrantes de equipo, organización y prensa internacional pudieran escapar del campamento para conocer el centro salteño y sus bondades culinarias, entre las que las empanadas se robaron el protagonismo. Es así que a la mañana siguiente antes de embarcar en el Fokker de la Fuerza Aérea que trasladó parte de la caravana a Tucumán se escuchó en distintos idiomas: “No quiero irme. Ojalá pueda volver”.
El campamento montado en el Centro de Convenciones de la ciudad de Salta fue elegido entre los asistentes del Dakar como el mejor de la historia. Es que además del magnífico entorno montañoso, el verde, los árboles y hasta un lago artificial, se le sumaron las inéditas comodidades, como aire acondicionado en sala de prensa, comedor y demás salones, wi-fi gratis y veloz, baños pulcrísimos con enormes piletas de acero, y mullidas alfombras que invitaban a caminar descalzo.
De etiqueta o de mamemluco
El comedor dispuesto en el Salón Algarrobo del Centro de Convenciones tenía más aires de restaurante que de un comedor dakariano. Rodeado de enormes ventanales que miraban a las montañas y al lago, con grandes mesas redondas y sillas y la magnífica brisa de sus aire acondicionados, hicieron que los pilotos del equipo del argentino Emiliano Spataro se preguntaran al ingresar: “¿Podemos comer así o nos tenemos que cambiar?”.
Por una cabeza y algo màs
El campamento de Tucumán fue instalado en el Hipódromo de la ciudad, escenario ideal en el que además de montarse la carpa del Ministerio de Turismo de la Nación, que rememora una tienda árabe en el desierto con los colores nacionales, se dispuso reposeras, sillones, pequeñas mesas y coquetos fanales. Sin embargo, el único inconveniente es que los baños están a unos 500 metros de donde se armaron las carpas de los integrantes de la caravana y demás instalaciones de esta ciudad nómade.
Paseos en bici
El campamento de Tucumán dio la bienvenida a todos con buena música,cómodas instalaciones y con otra novedad: cuatro bicicletas para aquellos que quieran recorrer el campamento y evitar largas caminatas.
Cargas ak turi
Los periodistas argentinos y chilenos se hicieron muy compinches y hasta suelen ser los más bulliciosos y se festejan los chistes mutuamente en cada campamento. Por eso, cuando la selección argentina jugó con su par trasandina fueron juntos a ver el partido en la carpa de turismo de Chile, en Arica. Todo marchaba bien hasta que con el 1-0 llegaron las cargadas, hasta varios días después.
Cuarenta gramos
Desde que el Dakar se realiza en Sudamérica la comida en cada vivac está a cargo de la empresa Sodexo, que cuenta con personal permanente en todo el rally aunque en cada etapa se suma personal local. Es a media mañana, antes de servir el almuerzo, cuando el responsable del área imparte su clase magistral: “La pizzeta debe ser ubicada en el extremo derecho, y a un lado la ensalada. Tiene que verse muy atractivo y pesar 140 gramos”, dijo con acento francés.
Masajes para todos
Si bien en el Dakar es usual ver a masajistas en los equipos o en el campamento, sólo se abocan a los dolores de los competidores. Sin embargo, este año en las carpas de promoción turística de Chile había un gabinete con tres masajistas, dos de ellas mujeres para todo aquel que quisiera descontracturarse, al menos hasta la próxima etapa.
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