14/12/2012 - Causa Marita Verón

Ministerio público fiscal aseguró que persisten "preconceptos sexistas y clasistas" en la justicia

La Unidad Fiscal de Asistencia en Secuestros Extorsivos y Trata de Personas (UFASE), dependiente del Ministerio Público Fiscal(MP), aseguró hoy que persisten “preconceptos sexistas y clasistas” al referirse al fallo que absolvió a los trece imputados por el secuestro y desaparición de Marita Verón.

 Al analizar las “pocas líneas argumentales” que expresó el tribunal junto al fallo, la UFASE advirtió que “no se ha dado relevancia probatoria a los testimonios de las otras víctimas que 

pasaron por los prostíbulos que administraban las personas imputadas, hoy absueltas”. 

 “Esas chicas fueron iniciadas en el sistema prostibulario en edades tempranas debido a la violencia de género que aún persiste en nuestra sociedad”, indicó el documento. 

  El Ministerio detalló que las mujeres, además de declarar que vieron a Marita, “relataron sus propios infiernos y padecimientos, mostrando la cara más cruel del negocio prostibulario que aún hoy es naturalizado y visto en clave edulcorada”. 

 “Los valientes testimonios de las mujeres prostituidas fueron ignorados, mal interpretados o subestimados. O quizá todo a la vez”, afirmó en un comunicado. 

 El organismo explicó que “la experiencia de otros casos similares demuestra que el preconcepto sexista y clasista que, en general, portan los operadores del sistema judicial conduce a que no se conciba un testimonio de esas características como un argumento que precisa de recaudos especiales para su producción e interpretación”. 

  “Las absoluciones dan cuenta del escaso valor que se les otorgó y representan un pésimo precedente a futuro”, advirtió el Ministerio. 

 El documento también destacó el accionar de Susana Trimarco, madre de Marita Verón, quien “tuvo que enfrentar y denunciar a buena parte de las agencias policiales y judiciales que, con pistas falsas o trampas legales-procesales, le opusieron un sinfín de obstáculos”. 

  “Si el caso llegó a esas instancias de debate, en suma, fue gracias a ella”, asegura. 

   El Ministerio concluyó que sólo “desnaturalizando la desigualdad estructural entre lo femenino y lo masculino”, será posible “lograr que aquellas mujeres explotadas, que se debaten entre salir a contar su historia o seguir sometidas a la ley de la opresión, sepan que su voz vale y que su testimonio tiene sentido”.