Los cancilleres de los países que integran la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) debatieron ayer la situación política de Paraguay, suspendido del bloque en junio tras el "quiebre democrático" que significó la destitución del presidente Fernando Lugo.
Los cancilleres analizaron el documento que este viernes debatirán los mandatarios de la región -con excepción de la presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, y el de Venezuela, Hugo Chavez, que no asistirán a la cumbre por distintos motivos-, luego de recibir un informe del Grupo de Alto Nivel, conformado especialmente para analizar la cuestión Paraguay.
Este grupo, encabezado por el ex ministro peruano Salomón Lerner, recibió información de sindicatos, empresarios y organizaciones políticas paraguayas con el objeto de "legitimar un proceso democrático transparente".
"El informe busca dar una luz a los cancilleres para que se haga una observación electoral y que esto sea un camino, una apertura, una llave, como lo quieran llamar, para que Unasur luego pueda realizar el proceso en sí de recoger nuevamente al Paraguay en el seno democrático de las naciones", explicó Lerner.
Otras temáticas que debatirán mañana los presidentes son las referidas a la democracia y la inclusión social, y también se tiene previsto discutir el Protocolo de Paz, Seguridad y Cooperación entre los países de América del Sur, que busca crear condiciones de confianza recíproca entre las naciones.
Al inaugurar esta mañana la sesión de ministros, el canciller peruano, Rafael Roncagliolo, sostuvo que en medio de la crisis económica que afecta al mundo "esta es la hora de América del Sur"; destacó el buen momento que atraviesa la región y planteó construir una ciudadanía sudamericana para dar un paso decisivo de unión del bloque emergente.
La coyuntura de crisis nos permite hablar, dos siglos después, de la hora de América del Sur, pues la crisis, esta vez, nos encuentra unidos y con una visión clara y determinada sobre nuestro camino y destino común, señaló el canciller.
Añadió que actualmente la región está más cerca que nunca de cumplir con la promesa de vida independiente, destacó el carácter pacífico y democrático de los países de Unasur y propuso avanzar en la construcción de una ciudadanía sudamericana, estableciendo el libre tránsito de personas y un visado común.
Me entusiasma la posibilidad de un visado común sudamericano, similar al que tiene la Unión Europea, dijo el canciller peruano, y añadió que esa situación contribuirá a convertir a la región en "un polo turístico y de comercio intrarregional".
Por último, advirtió sobre la pretensión de algunos grupúsculos afines al terrorismo de adoptar formas nuevas al amparo de las libertades consagradas por el sistema democrático, y agradeció el "apoyo solidario" de los países de la región "en el tema del terrorismo, que el Perú ha sufrido de manera particularmente cruel y dolorosa.
El jefe de la diplomacia peruana afirmó que el terrorismo y la impunidad "no tienen lugar en la zona de paz que conforman las democracias de los países del bloque sudamericano".
El vicepresidente Amado Boudou, reemplazará Cristina Fernández de Kirchner, quien debió quedarse en Buenos Aires por prescripción médica. Boudou llevará a la cumbre un planteo sobre el accionar de los fondos buitre y la deuda soberana, a raíz del fallo del juez de Nueva York, Thomas Griesa, en contra de Argentina.
Para la Argentina, el tema "debiera interesarle a todos los países" por las consecuencias que trae, como el "colonialismo judicial", y consideró que la Unasur "es un ámbito apropiado para hablarlo y para que podamos tornarlo y darle mayor densidad", según dijo en su discurso la presidenta ante su par peruano, Ollanta Humala, en Buenos Aires.
Por otra parte, se espera que la representación argentina retome los conceptos de una misiva enviada días atrás a los mandatarios de la región con motivo de la situación de violencia en la Franja de Gaza, luego de que recibiera un llamado del presidente de la República Arabe de Egipto, Mohamed Morsi, expresando su preocupación por la escalada de violencia que vive la zona.
En ese sentido, Cristina adelantó en la carta que, teniendo la Unasur una "vocación de paz", es necesario que el bloque exprese su "exigencia para que el Consejo de Seguridad ordene el inmediato fin de las hostilidades y expresar al presidente (palestino) Mahmoud Abbas el total respaldo a su intenso trabajo por llegar a una paz que surja del diálogo y no de la violencia".
Además del argentino Héctor Timerman, participaron de las deliberaciones los cancilleres Antonio Patriota (Brasil), Alfredo Moreno (Chile), María Angela Holguín Cuéllar (Colombia), Ricardo Patiño (Ecuador) y Luis Almagro (Uruguay).
También asistieron la vicecanciller de Venezuela, Verónica Herrero; el embajador boliviano en Perú, Jorge Ledesma; la directora de organizaciones regionales hemisféricas de Guyana, Audrey Jardine Wddell; el ministro de Planificación de Surinam, Ginmardo Kromosoeto; y el secretario general de Unasur, Alí Rodríguez Araque.
Este miércoles, en tanto, los ministros de Defensa de la Unasur -también reunidos en Lima- expresaron su "solidaridad" con Argentina por la situación de la Fragata Libertad, retenida en Ghana por el accionar de los fondos buitre, y exhortaron a "las instancias que correspondan para su pronta resolución".
Así se estableció en la III Declaración de Lima tras la IV Reunión del Consejo de Defensa Suramericano de la UNASUR, que finalizó el miércoles en Perú. Ante esa situación, el ministro Arturo Puricelli agradeció el "amplio apoyo y adhesión a la posición argentina" y sostuvo: "Tenemos a un buque militar, un buque escuela, detenido por esos falsos inversores y especuladores".
Todos los derechos reservados Copyright 2007
Terminos y usos del sitio
Directorio Web de Argentina
Secciones
Portada del diario | Ediciones Anteriores | Deportes | Economia | Opinion|Policiales
Contactos
Publicidad en el diario | Redacción | Cartas al director| Staff