La Unión Siete Lagos, es la competencia de Mountain Bike que ya se perfila como un clásico que ningún amante de las bicicletas de montaña se puede perder, la misma se realizará el próximo 10 de noviembre, donde participarán decenas de corredores que transitarán los 110 km que separan a las ciudades de San Martín de los Andes de Villa La Angostura, a través a de la mágica ruta de los Siete Lagos.
“Si bien, seguramente habrá un grupo de punta que peleara por los primeros puestos, hemos pensado una carrera que pueda correr todo el mundo, con un entrenamiento medianamente adecuado, donde cualquier ciclista amateur puede participar de este evento. La idea es que la gente disfrute de la bici, en el marco de un paisaje impresionante de la Patagonia”, sostuvo Eduardo Labaton, organizador junto a Ileana y Agustín Neiman, de La Unión Siete Lagos.En la ruta de los Siete Lagos, conviven en delicada armonía los lagos: Lacar, Machónico, Falkner, Villarino, Espejo, Correntoso y Nahuel Huapi, contenidos por los parques nacionales: el Lanín y Nahuel Huapi, que además resguardan arroyos, cascadas, valles y montañas, que se pueden observar desde más de una decena de miradores naturales, ubicados en distintos puntos estratégicos de la ruta.
“La carrera fue pensada para que participen todas las personas a las que las apasiona tanto el deporte como la vida al aire libre y la naturaleza. El recorrido trazado, garantiza adrenalina, diversidad de suelos, enmarcados en uno de los paisajes más lindos de la Argentina”, expresó Illeana Suffern, quien además de ser una de las organizadoras, es guía de MTB del Parque Nacional Lanín y toda una especialista en este tipo de competencias.
La competencia avalada por las Secretarías de Turismo de San Martín de los Andes y Villa La Angostura, cuenta con la posibilidad de participaren dos categorías: INDIVIDUAL, y en la categoría POSTA de la que pueden participar en duplas o en parejas.
Ruta de los Siete Lagos.
Partiendo de San Martín de los Andes por la ruta que bordea el lago Lacar
Pronto aparecerán a la derecha el lago Machónico y su espectacular mirador natural. Ya a la altura del kilómetro 43 llega el turno de la cascada Vuliñanco, salto de agua de 35 metros que cae en dos vertiginosos brazos a causa de una enorme piedra que divide las aguas.
Poco después aparecen dos lagos unidos por un pequeño curso de agua, cada uno a un costado de la ruta. El primero en ser visto es el Falkner, hacia la izquierda, con servicios de camping sobre la playa. Inmediatamente después de una curva suave y hacia la derecha surge el lago Villarino.
Pasado este espejo, el camino tuerce a la izquierda y comienza el ripio. Un pequeño lago de aguas verdosas aparece en forma repentina, a la derecha del camino. Es el lago Escondido, de aguas verdosas, algo oculto en un espeso follaje.
Varios kilómetros más adelante y tras una curva pronunciada que vira a la derecha, aparece el lago Correntoso. La traza de la ruta acompaña durante un tramo la margen del lago. Una vez más el camino serpentea, esta vez hacia la izquierda y avanza hasta encontrarse con las aguas del lago Espejo, ubicado a la derecha, con mirador y área de acampe.
Poco antes de llegar a Villa La Angostura, volvemos a encontrarnos con el lago Correntoso: un puente sobre el río de igual nombre ofrece una estupenda vista panorámica. La ruta cruza este puente y es escenario de una verdadera curiosidad geográfica.
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