La presidenta brasileña Dilma Rousseff afirmó ayer que su gobierno está comprometido en la defensa de la diversidad cultural al poner en funciones a la nueva ministra de Cultura, la senadora Marta Suplicy, autora de un proyecto que legaliza el casamiento entre personas del igual sexo.
"Valorizar y respetar la diversidad cultural es esencial para construir la identidad nacional" destacó Rousseff durante la ceremonia realizada en el Palacio del Planalto ante ministros, legisladores e importantes miembros del oficialista Partido de los Trabajadores (PT).
Marta Suplicy sucede a Anna de Hollanda, con cuya caída ya
suman 13 los ministros que fueron removidos de sus cargos por
Rousseff en 21 meses de gobierno.
Suplicy es senadora del PT y fue alcaldesa de Sao Paulo entre 2001 y 2004 y su nombramiento coincide con la campaña hacia los comicios en que será elegido un nuevo intendente de esa ciudad, la mayor del país, el 7 de octubre.
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