La comunidad de San Bernardo, ubicada en el extremo noroeste del Territorio Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure (Tipnis), rechazó el fin de semana último la intangibilidad de la reserva y aprobó la construcción de una ruta entre San Ignacio de Moxos y Villa Tunari.
El acceso a San Bernardo es posible solo por la vía fluvial navegando a través del poderoso Río Mamoré y luego por la denominada 'embocadura' del Sécure y en esta época del año, cuando el caudal de las aguas es bajo y se forma una serie de peligrosas cachuelas, el viaje se lo realiza en cuatro días.
San Bernardo es apenas un caserío cubierto de árboles y
espesa vegetación, sin servicios básicos ni energía eléctrica, donde un
puñado de viviendas de madera y techo de hojas de jatata, ubicado en las
márgenes del Río Sécure, conforma el principal núcleo de asentamiento
de los pueblos Mojeño Trinitario y Yuracaré.
La brigada de la consulta previa, incluidos los observadores
internacionales de la Organización de Estados Americanos (OEA) y de la
Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), y miembros del Órgano
Electoral boliviano, sesionaron en el cabildo de la comunidad entre el
viernes 17 y el sábado 18 de agosto.
En la asamblea participaron 86 personas con derecho a voz y voto de la comunidad indígena.
Otros diez varones no asistieron a la cita por encontrarse en tareas de caza, pesca y recolección de frutos silvestres.
Durante el cabildo, los pueblos Mojeño Trinitario y Yuracaré
hablaron de cinco demandas comunes básicas: acceso a la salud, a la
educación, al agua, a la energía eléctrica y mejores condiciones para
desarrollar proyectos productivos.
En este último eje, San Bernardo quiere imitar el emprendimiento de
uno de sus miembros, que sembró dos hectáreas de caña de azúcar con
mucho éxito y ahora la comunidad considera que con un tractor se podría
ampliar la superficie agrícola, comercializar el producto en Trinidad y
mejorar su calidad de vida.
La brigada y los observadores nacionales e internacionales de la OEA
y la Unasur tomaron nota de los requerimientos, planes y proyectos que
expresó San Bernardo y ello se plasmó en un primer acuerdo sobre
"demandas de desarrollo y necesidades básicas" que ahora el Estado
deberá analizar.
Un facilitador indígena con dominio de las lenguas Mojeño
Trinitario, Yuracaré y español tradujo, para ambas partes, lo que en el
cabildo se decía.
Fue él quien, a través de uno de los brigadistas, explicó en detalle
el contenido de la Ley 180, de Intangibilidad del Tipnis.
En este punto el pueblo de San Bernardo pidió, tras la explicación,
un receso para debatir, sólo entre personas de la comunidad, los
alcances de la polémica Ley.
El debate interno se extendió por casi dos horas y el pueblo ya
tenía una posición oficial, clara y firme, sobre la norma, que la hizo
conocer oficialmente el corregidor Julián Noza una vez reinstalada la
asamblea: "Muchas de las actividades que proyecta la comunidad para
mejorar su calidad de vida, pueden ser perjudicadas por la
intangibilidad", dijo la autoridad.
Y el resultado del debate interno de los pueblos Mojeño Trinitario y
Yuracaré sobre la Ley 180 se plasmó en un segundo acuerdo con los
brigadistas de la consulta previa con un texto sin ambigüedades: "Se
levanta la intangibilidad".
Con San Bernardo, un total de las 32 comunidades del Territorio
Indígena Parque Nacional Isiboro Sécure que fueron consultadas rechazan
la 'intangibilidad' de la reserva, que impuso la VIII Marcha Indígena en
octubre del año pasado, y aprueban la construcción de una ruta entre
San Ignacio de Moxos y Villa Tunari.
En cada una de las incursiones de los brigadistas al Tipnis, los
observadores nacionales e internacionales registran en audio, imagen y
texto todos los detalles de los cabildos y asambleas.
San Bernardo, además de exigir la suspensión de la 'intangibilidad'
pidió que se apruebe en la Asamblea Legislativa una 'Ley Indígena' que
contemple medidas de salvaguarda del territorio indígena, pero que les
garantice también desarrollar sus actividades económicas.
Y éste planteamiento, fue un tercer acuerdo firmado con las brigadas de la consulta previa.
Estos los acuerdos con San Bernardo: 1. El Estado atenderá demandas
en salud, educación, dotación de agua potable y electrificación; 2. Se
levanta la intangibilidad del Tipnis, se aprueba la construcción de una
vía que conecte Villa Tunari con San Ignacio de Moxos y se sugiere
establecer puestos de control y fortalecimiento de los guardaparques; 3.
Aprobar en la Asamblea Legislativa Plurinacional una 'Ley Indígena' que
contemple medidas de salvaguarda del territorio indígena, pero que les
garantice también desarrollar actividades económicas.
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