La Municipalidad puso en marcha ese lunes el plan de recambio de 25.484 luminarias del alumbrado público lo que permitirá, por año, disminuir la emisión de 4 millones de metros cúbicos de dióxido de carbono al medio ambiente contribuyendo a contrarrestar el efecto invernadero, y además ahorrar más de dos millones de pesos en energía eléctrica destinando ese monto a concretar obras de mejoramiento para los vecinos.
El Intendente Domingo Amaya supervisó el inicio de las obras en el Barrio Padilla, y explicó que “se realizan en el marco del Programa Nacional de Uso Racional y Eficiente de la Energía” (Pronuree) que desarrolla la Secretaría de Energía de la Nación, tendiente al ahorro de energía eléctrica a través de la reconversión del alumbrado público en los municipios.
El Jefe Comunal resaltó que “estas obras contribuyen a mejorar la calidad de vida de los vecinos a través de un ambiente más saludable”. En el proceso de producción de energía se emite dióxido de carbono -un gas que impacta negativamente en el medio ambiente y que al concentrarse en altos niveles en la atmósfera contribuye al calentamiento global- por lo que el ahorro anual de energía significará la reducción este gas en el aire.
“La energía que se ahorra se pone al servicio de la industria y la producción que la necesitan, y el dinero que se economiza en gasto eléctrico, se vuelca en más obras y servicios para los vecinos”, resaltó el Jefe Comunal.
El plan comprende la reconversión del 55% de las luminarias que existen en la ciudad, en una tarea que beneficiará a los 500.000 vecinos que residen en ellos.
Se reemplazarán 17.839 lámparas denominadas “peritas” de 150W, por otras de 100W, que fueron construidas con nuevas tecnologías y tienen un rendimiento superior permitiendo un ahorro energético del 33% conservando los niveles lumínicos. En tanto que otras 7.645 luminarias de 250W, serán cambiadas por lámparas de 150W de mayor potencia, permitiendo un ahorro de energía de 37%. El ahorro que tendrá el municipio por año en energía eléctrica será de $2.120.188,81.
El plan demandará una inversión de aproximadamente 23 millones de pesos, aportados porla Secretaría de Energía, dependiente del Ministerio de Planificación Federal, Inversión Pública y Servicios.
Se trata de una continuación del programa PRONUREE, que en una primera fase comprendió la entrega de 390.000 lámparas de bajo consumo de uso domiciliario y su canje por lámparas comunes, en una tarea que se realizó casa por casa en todo San Miguel de Tucumán.
Cabe recordar que el Senado de la Nación distinguió a la Municipalidad de San Miguel de Tucumán con el “Reconocimiento a la Buena Gestión Municipal por los trabajos que lleva adelante para reconvertir el alumbrado público", con la finalidad de disminuir el consumo eléctrico y ahorrar energía.
En San Miguel de Tucumán el sistema de alumbrado público funciona de manera óptima en el 98%. En los últimos años se iluminaron 4.800 cuadras, lo que significa iluminar una distancia equivalente a la que existe desde nuestra ciudad hasta Villa María, Córdoba, con una lámpara cada 25 metros.
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