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AMPLIARRetrocede el proyecto de demoler la ex Brigada

Retrocede el proyecto de demoler la ex Brigada

Durante la semana surgió una polémica a raíz de un proyecto de ley presentado por los legisladores Gutiérrez y Terán para demoler la ex Brigada de Policía. “La realidad no se borra de un plumazo”, expresaron desde la Fundación Memorias e Identidades del Tucumán. También mostró su rechazo el secretario de DDHH, Humberto Rava. El viernes el legislador González Navarro y seis de sus pares presentaron otro proyecto para evitar la demolición.

Seis legisladores presentaron un proyecto de ley para evitar la demolición de la ex Brigada de Investigaciones de la Policía, durante la jornada de ayer. Esto ocurrió luego de que los también oficialistas José "Gallito" Gutiérrez y Sisto Terán Nougués, propusieron, el 24 de abril, mediante un proyecto de ley, derribar las viejas paredes del edificio de avenida Sarmiento al 500 porque es "un símbolo del horror" de la dictadura, dijeron.

"Eso fue un centro clandestino de detenciones, de torturas y de secuestros. Conlleva un recuerdo horrible, que nada tiene que ver con ese hermoso pulmón de Barrio Norte. No podemos permitir que ese lugar siga tapando la vista de la plaza Urquiza", opinó días atrás el parlamentario del bloque Tucumán Crece.

Esta situación causó una importante polémica. “La realidad no se borra de un plumazo, y mucho menos, de un plumazo legislativo, que además, en una demostración de que no se ha entendido lo que esta democracia que vivimos ha sabido construir, usa el argumento del horror para justificar el derribo del edificio y desconoce, entre otras cuestiones la ley nacional 26691 que crea los Sitios de Memoria, en aquellos lugares donde se llevaron a cabo la tortura, la muerte y el avasallamiento a la dignidad humana”, expresaron en un comunicado desde la Fundación Memorias e Identidades del Tucumán, presidida por Marta Rondoletto, en una carta dirigida al presidente subrogante de la legislatura, Regino Amado.

“Las paredes de la sede de la Brigada, identificadas con el terror y la impunidad, deben dar,  a las generaciones venideras,  testimonio de la capacidad de reconstrucción del tejido social de los tucumanos. Y por ello, la Brigada no solo debe ser conservada sino acondicionada, en tanto Sitio de Memoria, para la realización de acontecimientos y actividades culturales, educativas y sociales”, dice el texto.

El secretario de Derechos Humanos de la provincia, Humberto Rava también salió al cruce. “Es la memoria la que de manera dinámica y viva puede mostrar a los ciudadanos de hoy y a las futuras generaciones lo que ocurrió, cómo ocurrió y la forma en que el pueblo argentino reaccionó frente al autoritarismo. Hay que preservar documentos históricos, lugares y objetos, hacerlos accesibles a todos, para vincular los hechos históricos con el presente enriqueciendo la cultura de la democracia. Por eso, la fachada que alguna vez fue testigo del horror, lejos de derribarse debe ser señalizado y transformado en un sitio de memoria para las futuras generaciones”, puntualizó.

No se derriba

Tras la polémica desatada por quienes se oponían a la demolición, otros seis legisladores, encabezados por el también alperovichista Ramiro González Navarro, presentaron otro proyecto solicitando a la adhesión a la ley nacional que protege edificios que hayan sido usados como centros clandestinos de detención o tortura, para convertirlos en museos.

De esa manera, el edificio que oficia de tabique entre la nueva sede legislativa y la plaza Urquiza seguirá en pie para recordar lo ocurrido allí en los 70. 

Sebastián Ganzburg