El coordinador de la Unidad Fiscal de Seguimiento de las causas por violaciones a los derechos humanos, Pablo Parenti, evaluó como "un primer paso positivo" las reglas que impartió la Cámara de Casación Penal para acelerar los juicios por delitos de lesa humanidad, y consideró "indispensable" que sean acompañadas por un "control de la gestión judicial".
"Los jueces tienen que tener total libertad para decidir sobre la culpabilidad o inocencia de una persona, pero existen cuestiones de gestión que dilatan los juicios, como la falta de lugar de las audiencias o las frecuencias, y ese es el paso que falta dar", apuntó el funcionario en diálogo con Télam.
Días atrás, la Cámara Nacional de Casación Penal aprobó seis reglas
prácticas para aplicar en delitos complejos y en causas por violaciones a
los derechos humanos, tras recibir propuestas de organismos vinculados
al tema, como la Unidad fiscal que encabeza Jorge Auat y que depende de
la Procuración General de la Nación.
Parenti justificó la acordada porque "existe un contexto que hace falta
ordenar para ganar en gestión judicial" y señaló la necesidad de que las
pautas dadas por Casación "se complementen con otras que regulen otros
ámbitos, como el período de instrucción", previo al juicio oral.
"En la etapa de instrucción todavía hay muchos problemas", apuntó, y dio
como ejemplo la acumulación de expedientes en causas que se vinculan
por la repetición de sus autores o por pertenecer al mismo lugar del
hecho, y que "arrojan juicios parciales, con testigos que se repiten en
múltiples procesos" y que exigen "aplicar reglas de conexidad".
Para Parenti, otro aspecto para mejorar son "los tiempos que se toman
los jueces de instrucción para responder a la fiscalía cuando presenta
pedidos de indagatoria".
"Tenemos muchos casos en los que el Ministerio Público pide la
indagatoria a personas y los jueces no responden porque el código
procesal no establece límites de tiempo", puntualizó el funcionario.
Sobre la frecuencia de las audiencias, que Casación no impone sino que
"sugiere una frecuencia razonable", la Unidad Fiscal considera que "debe
haber audiencias cuatro veces por semana en los juicios extensos" y
propone "nombrar jueces subrogantes" si los tribunales están destinados
en otro proceso.
Sobre el tema, Parenti puso como ejemplo y cuestionó al tribunal Oral
Federal de Salta por fijar audiencias "sólo lunes y martes por la tarde"
en un juicio previsto para mayo próximo donde se ventilarán hechos que
afectaron a 28 víctimas, que se prevé que declaren más de doscientos
testimonios y donde están involucrados 20 imputados.
"Estas cuestiones son las que hay que empezar a controlar con mecanismos
de gestión y una integración con cada tribunal", dijo al insistir que
en la evolución de los juicios "es clave un crecimiento notable en lo
que es la administración en la gestión judicial".
"A esta altura, y después de cinco años de juicios, no puede ser que los
juicios se posterguen por falta de salas o se suspendan por cuestiones
caprichosas", dijo a modo de ejemplo.
Para Parenti, la época actual muestra que "el paradigma de que cada
tribunal resuelve las cosas como le parece, hace crisis" y destacó que
los procesos judiciales "dejan como enseñanza que la administración de
justicia tiene que desarrollar algunas herramientas de gestión que
tradicionalmente no tuvo".
"Vemos con expectativas que la acordada de la Cámara de Casación Penal sea el comienzo de una nueva etapa", sintetizó.
Las reglas de Casación contemplan medidas para evitar la dilación de los
juicios como también la protección de las víctimas que deben
testimoniar en cada proceso.
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