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AMPLIARSusana Trimarco protagonizó ayer una larga jornada en la reanudación del juicio por la desaparición de su hija Marita Verón

Trimarco continuará con su declaración

Susana Trimarco protagonizó ayer una larga jornada en la reanudación del juicio por la desaparición de su hija Marita Verón y el cuestionario de los abogados de los imputados seguirá hoy luego del cuarto intermedio que dispuso esta noche el tribunal.

La madre de Marita tuvo que dar detalles durante varias horas sobre su accionar y los datos recogidos desde el momento en que comenzó a investigar la desaparición de su hija.

El testimonio de Trimarco se había suspendido el martes de la semana pasada, luego de que Gonzalo Gómez, uno de los imputados que tiene la causa, fue operado de cálculos en la vesícula.

A raíz de ese hecho, los jueces Alberto Piedrabuena, Emilio Herrera Molina y Eduardo Romero Lascano ordenaron la suspensión de las audiencias que se reanudaron hoy con la presencia de Gómez en tribunales.

Gómez, fue operado de la vesícula, y no podía cumplirse el requisito de la legislación tucumana de que esté presente en la audiencia.

A raíz de ese hecho, los jueces Alberto Piedrabuena, Emilio Herrera Molina y Eduardo Romero Lascano ordenaron la suspensión de las audiencias, que se reanudaron hoy con la presencia de Gómez.

Gómez está imputado en el juicio junto a su madre y su hermano, y el tribunal busca dilucidar su responsabilidad en la supuesta privación ilegítima de la libertad y promoción de la prostitución de Marita Verón, secuestrada el 3 de abril de 2002, cuando tenía 22 años.

Trimarco, en su condición de principal testigo del caso, respondió preguntas del abogado Cergio Morfil, defensor de los hermanos María Jesús y Víctor Rivero, quien dijo haber detectado contradicciones.

"Son contradicciones que pueden ser relevantes para la defensa como cuando la señora dijo que no sabía ni le constaba que tanto Víctor como María Jesús Rivero hubieran sido algunas de las personas que habrían plantado pistas falsas", indicó Morfil.

El abogado sostuvo que "todas las pistas de los diferentes lugares donde se la vio a Marita están en el expediente pero traídas por ella y en ningún momento pudo precisar que María Jesús Rivero le dijo `mire señora, vamos a tal parte`".

Además, Morfil sostuvo que "es una barbaridad" la declaración de Trimarco al sostener que  "Rivero era prostituta en Ledesma y (su expareja Rubén) Ale la trajo para trabajar en Tucumán".

La réplica a los dichos de Morfil llegó por parte de José Dantona, abogado de Trimarco, quien destacó que "seguramente escucharán a los abogados defensores decir que se encontraron con una persona desmemoriada en su intento por desprestigiarla". 

“Pasaron muchos años y hay detalles que no recuerdo, pero todo lo que cuento lo hago de buena fe", afirmó Trimarco.

Se espera ahora que los otros abogados defensores se concentren en el entorno de la víctima, con la hipótesis de que se fue por su propia cuenta y no secuestrada por tratantes.

Después de Trimarco deben declarar los otros 160 testigos. El abogado Carlos Garmendia, también defensor de Trimarco, adelantó que la próxima testigo será Patricia Soria, enfermera de una maternidad que insistió para que Marita se colocara un DIU.

El abogado dijo que luego será el turno de Miguel Ardiles, otro empleado de la maternidad, y adelantó "un testimonio muy fuerte" por parte de Fátima Mansilla.